La UE veta la fusión de las bolsas de Londres y Frankfurt en pleno Brexit
El mismo día en que se hacía oficial la petición del Reino Unido para salir de la UE, la Comisión Europea bloqueó la fusión entre la Bolsa de Londres (LSE London Stock Exchange) y la de Frankfurt (Deutsche Börse).
El bloqueo de Bruselas sobre la operación que iba a crear la mayor plaza financiera del Viejo Continente es la primera víctima oficial del Brexit. Prueba de que la fusión, valorada en 25.000 millones, tenía pocas posibilidades de prosperar es que el pasado mes de febrero Londres ya había rechazado adoptar los requerimientos exigidos por el Ejecutivo comunitario. Este rechazo puso en bandeja de plata un argumento a Bruselas para frenar la fusión. “Al no haber puesto en marcha las medidas correctivas necesarias para levantar la amenaza a la competencia, la Comisión ha decidido prohibir la operación”, dijo la comisaria europea de la Competencia, Margrethe Vestager.
La fusión ya no era tan conveniente para ambas partes como en su origen, y ninguna de las dos quería asumir la responsabilidad de una ruptura unilateral, que hubiera supuesto pagar penalizaciones. Así que la negativa de LSE a desprenderse de MTS constituye un buen pretexto de los británicos para salir de una operación que se forjó tres meses antes del Brexit porque, en el nuevo contexto normativo, “los ingleses habrían sido sometidos a la supervisión europea y alemana”, recordaba Benoit Le Bret, abogado de Gide. De hecho, en los mercados, tanto las acciones de LSE (+2,7%) como la libra esterlina (+0,21%) se apreciaron. “Los inversores creen que ahora la bolsa inglesa puede ser objeto de otras operaciones, tal vez de plazas financieras norteamericanas o asiáticas”, explica Blieffert.
Cuando anunciaron hace un año la operación, ambas partes dijeron que “el resultado del referéndum no es una condición para la fusión”, pero afirmaron que “salir de la UE pondría en peligro este proyecto”. El resto son coincidencias.