El PP avala con su voto que el Congreso investigue sus cuentas
El próximo líder del PSOE decidirá si reclama interrogar a Rajoy
Todas las lucecitas que en el marcador representan los escaños del hemiciclo se iluminaron en verde. Con 316 diputados presentes ayer al mediodía en el pleno del Congreso, la creación de una comisión de investigación sobre la presunta financiación ilegal del PP fue aprobada por una insólita unanimidad de 316 votos a favor, ninguno en contra y ninguna abstención. Y es que hasta el PP se sumó –a la fuerza ahorcan–, al tiempo que forzará que el Senado abra otra investigación, en este caso, sobre las cuentas de todos los partidos políticos, fundamentalmente dirigida a la de los grupos que presentaron la iniciativa aprobada ayer en el Congreso: el PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos.
Aunque la constitución de esta nueva comisión en el Congreso no será inmediata, pues ya hay atasco. Por lo pronto, se acaba de constituir la que investigará el presunto uso partidista del Ministerio del Interior durante el mandato de Jorge Fernández Díaz, centrada en la operación Catalunya, y hasta el próximo miércoles no arrancarán las comparecencias, con la del propio exministro. Y aún está esperando en la cola la segunda comisión de investigación ya aprobada en esta legislatura, sobre Bankia y la crisis financiera. La aprobada ayer, sobre la financiación presuntamente irregular del PP, no está previsto que arranque, por tanto, hasta el final de este período de sesiones, es decir, antes del próximo verano.
La actual dirección del grupo socialista, encabezada por Antonio Hernando, “no descarta” pedir la comparecencia de Mariano Rajoy para ser interrogado sobre las cuentas del partido que preside. Ahora bien, para cuando esta comisión pueda echar a andar, ya habrá un nuevo
“Esto no es una comisión de investigación, sino de demolición contra el PP”, lamenta su portavoz
líder en el PSOE, surgido de las primarias del próximo 21 de mayo. Y será el ganador –o ganadora– quien habrá de tomar la última decisión al respecto.
Aunque el PP asegura que no le tiemblan las piernas, y por eso ayer también votó a favor: porque sus cuentas ya han sido investigadas hasta el tuétano por los jueces. “¿Para qué quieren esta comisión, si ya lo saben todo?”, reprochó el portavoz popular, Eloy Suárez. “Y si ustedes no tienen nada que ocultar, ¿de qué tienen miedo?”, retó al PSOE, Unidos Podemos y Cs, que rechazan la comisión pedida por el PP para investigar las cuentas de todos. “Esto no es una comisión de investigación, sino de demolición contra el PP”, lamentó. Y criticó que el único objetivo es “desgastar” al partido del Gobierno, porque antes de arrancar la comisión “ya tiene dictado el fallo”. El PNV votó igualmente a favor, pese al “escepticismo” que admitió su portavoz, Aitor Esteban: “Al final los montes acabarán pariendo un ratoncito; mucho ruido y pocas nueces”.
Artemi Rallo (PSOE) resaltó en cambio la trascendencia de esta investigación: “¡Sanará la gangrena de corrupción vinculada a la financiación ilegal del PP!”. Y Carolina Bescansa (Podemos) dio por hecho que habrá mucho que escarbar porque “el PP es el partido más corrupto de la historia de la democracia”. Juan Carlos Girauta (Cs) se colgó a su vez la medalla, porque esta comisión era una “exigencia no negociable” de su acuerdo con el PP para investir a Rajoy.
Aunque Joan Baldoví (Compromís) espetó, ante el entusiasmo de Cs y PSOE: “¿No hubiera sido mejor dejar a este partido fuera del Gobierno?”.