El PSOE dispara hoy la carrera de las primarias con las espadas en alto
Susana Díaz y Patxi López asisten a un comité federal bajo la sombra de Sánchez
Seis meses después de que Pedro Sánchez se viera forzado a dimitir como líder del PSOE –“no fue derrocado, fue derrotado”, precisa Tomás Gómez–, los cerca de 300 delegados que protagonizaron aquel caótico comité federal regresan hoy al “lugar del crimen”. La gestora que tomó aquella noche los mandos de Ferraz diseñó un calendario que tenía, como primer objetivo, apaciguar la rabia que provocaron aquellos hechos. También “el incendio interior que nos está consumiendo”, en palabras de Javier Fernández. Pero el propio Sánchez –ahora “resucitado, como Lázaro y Cristo”, según ironía de su asesor Andrés Perelló– sigue empeñado en que nadie olvide aquella nefasta jornada de hace seis meses: “¡A la militancia no nos gustó lo que se hizo ni cómo se hizo!”, clama en sus mítines. De hecho, el recuerdo de aquel convulso comité federal es el pilar de su relato para intentar recuperar el cargo perdido. Una estrategia no obstante “muy equivocada”, según aseguran sus adversarios: “Él fue el máximo responsable de aquel bochorno, así que debería ser el primer interesado en que se olvidara”.
El comité federal será hoy el escenario en que se verán las caras, ya como candidatos in péctore, dos de los aspirantes, la andaluza Susana Díaz y el vasco Patxi López. Sánchez tiene ya plaza de por vida en este órgano, pero no es costumbre de los exsecretarios generales acudir ni se le espera. Sí acudirán dirigentes ahora integrados en los equipos de los tres aspirantes. Y las espadas están en alto.
Los fieles a Sánchez, de hecho, no descartan que hoy pueda haber fricciones: “Lo iremos viendo”. Y también afines a Díaz esperan salidas de tono: “Algo dirán, para mantener el fragor de su penosa batalla”, avisan. Aunque insisten en que su estrategia de “cuestionar todos los pasos del procedimiento” no es sino un “síntoma claro de debilidad”.
Las espadas están en alto. Pero la reunión que ayer celebró Mario Jiménez con todos los secretarios de organización de las federaciones del PSOE –y el del PSC, Salvador Illa–, fue tranquila, “sin discusiones”. Lo cual sería un indicativo para la cita de hoy. “Cuando las reuniones de los secretarios de organización son tensas, se traslada luego al comité federal. Pero no ha sido así”. Y eso que entre los reunidos había miembros del equipo de
UN MÍNIMO DE 9.000 FIRMAS La batalla de los avales, el primer termómetro, se dirimirá entre el 20 de abril y el 4 de mayo
Díaz –el andaluz Juan Cornejo o la aragonesa Pilar Alegría–, de Sánchez –el navarro Santos Cerdán– y de Patxi López –el vasco Miguel Ángel Morales o el madrileño Enrique Rico–. Todos acordaron el
EL VOTO DE LOS MILITANTES El censo del PSOE podría incrementarse por vez primera tras muchos años de caídas
calendario del proceso de primarias que hoy aprobará el comité federal. Así, está previsto que ni siquiera tenga que ser votado, sino que se ratifique por asentimiento. Lo cual evitará, eso sí, que se visibilicen
las mayorías y minorías existentes en el máximo órgano del PSOE entre congresos, ahora ante la tensa pugna de las primarias.
El primer “termómetro” sobre el equilibrio de fuerzas entre los aspirantes en esta batalla será en todo caso el 5 de mayo, cuando queden proclamados provisionalmente los candidatos que hayan superado el listón del 5% de avales de la militancia –unos 9.000– tras el proceso de recogida de firmas que se producirá entre el 20 de abril y el 4 de mayo. La campaña, propiamente dicha, tendrá lugar entre el 9 y el 20 de mayo. Durante esos días, se celebrará el único debate previsto entre los tres aspirantes. Y el 21 de mayo será la votación, donde todos los militantes socialistas al corriente del pago de su cuota podrán elegir a su próximo secretario general.
El censo se cierra oficialmente hoy, aunque no se conocerá definitivamente hasta el 28 de abril. Y alguno de los reunidos ayer en Ferraz dio ya por hecho que, por primera vez en muchos años, este censo experimentará un incremento en el número de afiliados. La última vez que se cerró, el año pasado para la consulta sobre el acuerdo de investidura con Ciudadanos, era de 189.256 militantes. “Es normal que el censo crezca, porque hemos visto un gran interés de la gente por participar en este proceso”, dice un dirigente afín a Susana Díaz. “Se está detectando afiliación estos días”, corrobora un cargo fiel a Pedro Sánchez. Así que algo bueno para el PSOE traerá, al menos, un proceso que ya muchos temen que mantendrá divididos a los socialistas al día siguiente de cerrarse.
JUAN CARLOS MERINO
Madrid