Corrupción al por mayor
La FIFA entrega un informe de 1.300 páginas a las autoridades suizas y de EE.UU.
La FIFA ha prometido dar más detalles a finales de mes pero del volumen de la investigación interna que ha realizado el organismo rector del fútbol mundial se puede extraer una primera conclusión: existía corrupción al por mayor en su seno, algo que ya se intuía tras el escándalo que acabó con la presidencia de Joseph Blatter. La FIFA anunció ayer que ha finalizado sus pesquisas de puertas adentro tras 22 meses de trabajo y que ha entregado a las autoridades suizas un informe de 1.300 páginas. No es el único dato grandilocuente. Hay más. Como que esas páginas van acompañadas de otras 20.000 de pruebas documentales o que se han analizado hasta 2,5 millones de documentos.
Todos estos papeles ya obran en poder de la Fiscalía General de Suiza, que ha reconocido la “estrecha y también continuada colaboración de la FIFA”, y serán trasladados al Departamento de Justicia de Estados Unidos, país donde buena parte de los implicados en el caso están pendientes de un juicio que previsiblemente arrancará después del verano.
“La FIFA se comprometió a realizar una investigación global y en profundidad de los hechos a fin de poder atribuir responsabilidades a quienes cometieron actos delictivos dentro del entorno futbolístico. Las autoridades continuarán persiguiendo a aquellos que se lucraron y se aprovecharon de la confianza depositada en sus cargos dentro del fútbol”, comentó el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, que tomó el control de la organización en febrero del 2016.
Sobre los detalles del informe la FIFA justificó no ser más precisa por razones legales. “No podemos publicar o comentar las conclusiones de la investigación porque las investigaciones de la Fiscalía suiza y el Departamento de Justicia de Estados Unidos todavía están abiertas”. Sin embargo, una fuente anónima contactada por la agencia AP asegura que en el informe de la FIFA no se juzga qué individuos deberían ser encausados. Esta fuente señala que algunos testigos clave se habrían negado a hablar.
En Estados Unidos el caso lo abrió la exfiscal general Loretta Lynch y ahora deberá pasar a manos de la administración Trump. Mientras, en Suiza el fiscal sigue siendo Michael Lauber, que abrió procesos en el pasado contra Blatter y el que fue su mano derecha, Jerôme Valcke. Ambos fueron suspendidos en septiembre del 2015 y después fueron castigados por el comité de Ética de la FIFA. El año pasado la propia organización acusó a Blatter, Valcke y al exdirector de finanzas Markus Kattner de embolsarse contratos valorados en un total de 74,8 millones de euros.
Cabe recordar que por todo este escándalo de corrupción Blatter está cumpliendo un castigo de seis años mientras que el expresidente de la UEFA Michel Platini recibió una sanción de cuatro. Habrá que ver a cuántos más dirigentes afecta una investigación a gran escala de la que todavía quedan muchos capítulos por escribir.
JUAN BAUTISTA MARTÍNEZ UNA PESQUISA INTENSA La investigación de los escándalos de la cúpula del fútbol analizó 2,5 millones de documentos