Rajoy adula al PNV
El presidente del Gobierno se hace cargo de las negociaciones para los presupuestos.
Ahora la negociación se hará por arriba. Es la confesión de uno de los responsables del PP implicados en las conversaciones con los diputados del PNV para que apoyen los presupuestos generales del Estado. Ese “por arriba” no es otro que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, con el del PNV, Andoni Ortuzar, y el lehendakari Iñigo Urkullu.
Las negociaciones, aseguró ayer el ministro Portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, no se agotan en los acuerdos con Ciudadanos, con Coalición Canaria, y con UPN, “las negociaciones llevan tiempo”, pero no queda mucho. Rajoy necesita los cinco votos del PNV el 4 de mayo, el segundo día del debate de totalidad, cuando se voten las enmiendas de totalidad que piden la devolución al Gobierno. Rajoy necesita 175 diputados para sacarlos por la mínima, a través de un empate en tercera votación, y de momento sólo tiene 170. Le faltan los cinco del PNV. Hasta entonces queda en barbecho la negociación para obtener el voto 176, el del diputado de Nuevas Canarias, Pedro Quevedo, que le permita después aprobar los presupuestos. Ahora, y después, Rajoy se empleará a fondo, porque para él, dijo en rueda de prensa Íñigo Méndez de Vigo, la aprobación de los presupuestos es “prioritaria” para el futuro de la legislatura.
Por eso, y por la dificultad de aprobar unas cuentas que requieren cuadrar tantas pretensiones y satisfacer tantas demandas, el Gobierno resta importancia a que las comunidades autónomas, incluso algunas del PP, hayan levantado la voz contra las inversiones territorializadas que figuran en los presupuestos.
El ministro Méndez de Vigo enmarcó dentro “la normalidad” las quejas de los dirigentes autonómicos, a los que respondió recordándoles que el mismo presupuesto permitirá que su financiación se incremente en 5.386 millones de euros respecto a la del 2016. Asimismo les recordó que se han beneficiado de los 217.000 millones de euros que ha inyectado el Gobierno en las comunidades a través del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA).
“Son movimientos que se producen siempre que se presenta el proyecto de ley de presupuestos”, dijo el ministro en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Sin embargo, reconoció que “no es fácil encajar todas estas piezas y entiendo que estos pronunciamientos son normales en una negociación de este calibre”, aunque subrayó que el Gobierno “siempre está dispuesto a hablar y a buscar acuerdos.