Francia califica de “gran paso” la entrega de armas unilateral de ETA
Bayona reúne a veinte mil personas en apoyo a los “artesanos de la paz”
El ministro del Interior francés, Matthias Fekl, calificó el desarme de ETA, escenificado ayer a mediodía en Bayona, como “un gran paso” y “una jornada indiscutiblemente importante”.
Francia, cuya cooperación con Madrid en materia de terrorismo es excelente, y especialmente fluida desde 2012 con la Administración de François Hollande, no se ha sumado a la indiferencia mantenida en Madrid, pero no hay gran contradicción en ello: cada gobierno ha hecho su papel en toda esta escena.
Desde que ETA anunciara el abandono de la violencia en octubre del 2011, la organización vinculó su desarme con la excarcelación de sus presos o medidas en ese ámbito. El desarme unilateral no estaentregó ba en la agenda. Ha sido sino un resultado de la posición inflexible de Madrid que París suscribe en lo esencial.
A través de intermediarios, ETA envió mensajes a París para intentar evitar el naufragio del unilateralismo. Todos fueron desoídos. El acto de ayer, la ceremonia del desarme unilateral, ha sido la confirmación de que los presos de ETA, cuya suerte era la inicial contrapartida, están a merced de la buena voluntad del Gobierno español, lo que se parece mucho a una derrota.
Ese es el sentido del “gran paso” y de la “importante jornada”, mencionada por el ministro francés en su declaración, realizada a mediodía en la plaza Beauvau, sede del Ministerio del Interior en París.
La decisión de entregar las armas, “ha sido tomada de forma unilateral por ETA”, subrayó el ministro Matthias Fekl. “Tengo, naturalmente, un pensamiento especial para todas las víctimas, sus familias, y sobre todo para los policías y miembros de la guardia civil”, dijo. No ha habido ningún acuerdo francés sobre las modalidades del desarme. Lo demás ha sido puro sentido común: dejar que los sentimientos a favor de la libertad y el acercamiento de los presos se expresara en Bayona, en un acto impresionante al que asistieron 20.000 personas, recibir las listas de los ocho zulos con 120 armas y explosivos repartidos por el sudoeste de Francia, e iniciar las correspondientes investigaciones judiciales: hay 300 casos no resueltos y las armas son piezas de convicción. En la última cumbre hispanofrancesa celebrada en Málaga se cerraron acuerdos expresos en la materia. En Bayona, muchas personalidades francesas e internacionales, entre ellas el representante del Vaticano Matteo Zuppi, llegado en un jet privado, el pastor Harold Good, que fue mediador con el IRA, y el presidente de la Comisión Internacional de Verificación, Ram Manikkalingam, que la lista de los zulos a las 8 de la mañana. Media hora más tarde comenzaba el operativo policial. En la plaza de Bayona, el exdirector de Interpol, Raymond Kendall, calificaba como “primitiva” la actitud del Gobierno español. “Apoyo a las víctimas”, “desarmar los espíritus”, “acercar a los presos vascos”, se dijo.
El ministro del Interior recordó a las víctimas y a los agentes de policía en su declaración pública