Falta más implicación de los inquilinos y también de los jueces y fiscales
Ya no basta con decir que se está haciendo todo lo posible para frenar los robos en viviendas. Hay que dar un paso más. Y eso no depende sólo de la policía, de los Mossos d’Esquadra en Catalunya, depende también de los inquilinos que han de responsabilizarse más de la seguridad de sus casas y depende de los jueces y fiscales que con el actual marco legal cuesta que en ocasiones pidan prisión preventiva para los arrestados.
El inspector Jordi Ollé y todos y cada uno de los mossos centrados en esta problemática conocen bien las dificultades que tienen para trabajar este tipo de delincuencia. “No queremos que la gente piense que estamos dando excusas. Pero somos conscientes de que con el actual marco legal hay detenciones que quedan en nada”.
Ollé se refiere a las decenas de detenidos in fraganti. Desde que se activaron los planes para prevenir los robos en viviendas, en los que participa incluso el helicóptero de Mossos para disuadir a los ladrones en las urbanizaciones más aisladas, se han producido numerosos arrestos de ladrones capturados en el momento justo de entrar o cuando acababan de salir. “Si se le detiene cuando aún no ha entrado, es sólo una tentativa. Y si ya ha salido, y aunque podamos demostrar que ese anillo de oro que lleva acaba de ser robado de esa casa de la esquina pero no hay pruebas de que el ladrón ha sido él, entonces sólo se le puede acusar de receptación”, detalla el inspector. Y entonces, ni uno ni el otro entrará en prisión.
Pero siguen encarcelados muchos de los arrestados en las últimas operaciones contra bandas organizadas. En la más reciente los Mossos trabajaron mano a mano con la Policía y lograron arrestar a 18 georgianos a los que se les pudo atribuir 46 robos con fuerza.
Pero de poco servirá todo el esfuerzo policial, los planes de prevención y las detenciones, si los inquilinos no se responsabilizan más de la seguridad de sus viviendas. “Sigue habiendo gente que sale de casa y sólo cierra de un portazo”, asegura Ollé. Así se entiende que los tres georgianos detenidos la semana pasada en Granollers llevaran de instrumental para robar en pisos, estampitas de la virgen y un clip del pelo. Y entraban.