La Vanguardia

Eli Capdevila

MADRE DE UNA VÍCTIMA DE TRÁFICO

- JAVIER RICOU

Eli Capdevila y Carles Sòria son los padres de Marta, una joven fallecida en un accidente de tráfico víctima de la imprudenci­a de otros. Su doloroso testimonio debe servir para conciencia­r más sobre el peligro al volante.

Madres, hijos, padres, hermanas, abuelos, nietos... Son las otras víctimas, las más invisibles, del drama de los accidentes de tráfico. Familias destrozada­s por el dolor cuando el asfalto les roba a un ser querido. La noticia llega sin esperarla, y tras la incredulid­ad inicial (la persona a la que se acaba de despedir ya no está o aquella a la que se espera jamás llegará a su destino), cada persona supera a su manera el duelo. Los familiares que peor lo llevan son aquellos que a la factura del drama por la pérdida de un ser querido tienen que sumar un extra de dolor por las circunstan­cias del accidente. Ocurre cuando la víctima no ha tenido ninguna culpa en el siniestro y las evidencias de negligenci­a del responsabl­e del accidente están muy claras.

¿Cabe en estos casos el perdón? Eli Capdevila y Carles Sòria responden al unísono: “No, una cosa así no se puede perdonar”. Su hija Marta (este mes de abril cumpliría 28 años) murió hace cinco meses en un accidente de tráfico. Un conductor que adelantaba a otro turismo a gran velocidad sacó a Marta de la carretera. El coche de la joven acabó sumergido en un canal de riego a decenas de metros del punto del impacto. No tuvo tiempo de esquivar al vehículo que se le echó encima. “La han matado. Esto es un asesinato en la carretera”, repiten una y otra vez sus padres.

El accidente ocurrió en la N-240, en un tramo de poco más de veinte kilómetros que une Les Borges Blanques con Lleida. Un punto negro que se ha cobrado una treintena de vidas (parecen demasiadas para tan pocos kilómetros) en los últimos ocho años. Marta, vecina de Les Borges, ha sido la última añadida a esa lista. Morir en un punto negro es otra circunstan­cia que suma dolor a la factura del drama cuando la víctima no ha tenido culpa alguna.

Hace años que alcaldes de municipios atravesado­s por ese tramo exigen al Ministerio de Fomento mejoras en la vía, descuentos en la autopista que discurre paralela a esa carretera o el desdoblami­ento de la N-240 en ese tramo para acabar con esta sangría en el asfalto. Peticiones que de momento han acabado en saco roto con compromiso­s verbales que no se cumplen. Los usuarios de la vía esperan ahora que la última promesa, en boca del propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en una reciente visita a Barcelona, sea la definitiva. Rajoy aseguró que esta carretera tendrá “atención preferente” del Gobierno en las futuras inversione­s en infraestru­cturas.

Una mejora que llega tarde para Marta y el resto de las víctimas. El hombre que segó la vida de Marta ha sido acusado de homicidio y la joven encontró la muerte en un tramo de carretera con un índice de mortandad (lo saben todos los que circulan por allí, administra­ción incluida) de los más altos de España. Circunstan­cias que explicaría­n la negativa de Eli y Carles a perdonar.

Su reacción ha sido la contraria. Ambos se han volcado, desde el día siguiente de la muerte de su hija, en una cruzada para que la

justicia actúe contra los culpables de ese siniestro y se acometan de inmediato mejoras en esa carretera. La familia se ha personado como acusador particular en la causa y los datos recopilado­s hasta la fecha sobre el accidente están confirmand­o su teoría inicial.

Carles asegura que han podido comprobar que el conductor autor del accidente “tiene nueve sanciones en su país de origen, Rumania, por delitos contra el tráfico”. Presume que el joven circulaba al menos a 150 kilómetros por hora con las luces apagadas (el siniestro ocurrió de noche) “porque se sospecha que hacía una carrera con otro vehículo, al que adelantó en una zona prohibida, y quería que este no advirtiera esa maniobra para sorprender­le”. Así que Marta ni tan siquiera habría visto llegar al coche que se le tiró encima.

Uno de los ocupantes del vehículo que causó el siniestro huyó del lugar tras el choque. Pero lo más grave, para los padres, es que ninguna de las personas de los otros vehículos que protagoniz­aron el temerario adelantami­ento (la conductora del otro vehículo, también rumana, acumula 11 sanciones de tráfico en su país) informaron a Mossos y Bomberos de que había un tercer coche implicado en el choque.

Era el turismo de Marta que salió despedido y cayó a un canal de riego paralelo a la carretera. Ese vehículo no fue descubiert­o hasta tres cuartos de hora después de la colisión. Y lo localizó un bombero que siguió el rastro de un hilo de aceite que iba de la carretera hasta ese canal.

“En ningún momento se preocuparo­n por el estado de nuestra hija; es más, como era de noche y no se veía nada intentaron ocultar que habían chocado contra su coche” afirman los padres. Eso duele, y mucho.

El único consuelo, llegado a este punto, es que la autopsia confirmó que Marta falleció por el impacto –“en sus pulmones no había agua”, revela Carles– y por lo tanto haberla localizado antes no le habría salvado la vida. Sus padres no quieren ni imaginar cómo se sentirían si la autopsia hubiese revelado otra cosa.

Lo único que reconforta ahora a Eli y Carles es pensar que la cruzada iniciada para eliminar ese punto negro cumpla su objetivo. “Es lo único que podemos hacer ya por Marta, que su muerte sirva al menos para que otras personas no encuentren la muerte en esa ratonera de asfalto”, concluyen estos desesperad­os padres.

LA PETICIÓN “A Marta la han asesinado y exigimos que los culpables paguen por ello”

LA CRUZADA Los padres de la joven, protagonis­tas de las protestas para pedir carreteras más seguras

LA FACTURA Hay un extra de dolor cuando la persona fallecida en el siniestro no tiene la culpa

 ?? MERCÈ GILI ?? Los padres de Marta visitan con frecuencia el punto en el que murió su hija, en la carretera que une Les Borges Blanques con Lleida, para depositar flores
MERCÈ GILI Los padres de Marta visitan con frecuencia el punto en el que murió su hija, en la carretera que une Les Borges Blanques con Lleida, para depositar flores
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain