Flores en la carretera para el recuerdo
El duelo por la pérdida de un ser querido se vive de mil maneras, y en las muertes de tráfico visitar el lugar puede servir de consuelo
Un ramo de flores señala el punto donde murió Marta. Son muchos los familiares que recuerdan así a seres queridos que han encontrado la muerte en el asfalto. Y tiene todo el sentido. Como afirma Eli (Marta fue incinerada): “Mi hija está ahí, en el punto donde la mataron”. Carles, el padre de la joven, también lo cree. “Yo voy allí el día 16 de cada mes, hablo con ella, me quedo un rato…”. Es lo mismo que si visitaran la tumba en un cementerio. Las flores en la carretera reconfortan, por lo tanto, a esos familiares de las víctimas del tráfico. Aunque para vivir esas visitas con serenidad tiene que pasar un tiempo.
Eli ha tardado tres meses hasta reincorporarse de nuevo a su trabajo. Vive en Les Borges Blanques y regenta un negocio en Lleida. Así que para ir a su puesto de trabajo tiene que pasar dos veces al día por el punto donde murió su hija. “Al principio incluso me planteé dejar el negocio para no tener que revivir ese mal trago a diario”, confiesa. Pero al final ha decidido que la vida tiene que continuar. “Ahora, cuando tengo tiempo, me paro allí, dejo flores y estoy un rato porque siento que Marta también está ahí”.
En el caso de los padres de Marta, cada uno lleva el duelo a su manera. Eli precisa aún soporte psicológico y tardó tres meses en reincorporarse al trabajo. Carles siguió con su actividad desde el primer día. “En mi caso no parar me ayuda a no pensar tanto en ella”, afirma el hombre. Eli pone cada semana una rosa junto a una foto de Marta que tiene en su casa. Carles le lleva flores a la carretera cada mes. El hecho de tener otra hija, dos años mayor que Marta, les ha ayudado mucho en su intento por recobrar la serenidad. Pero hay una cosa que aún queda pendiente y que centra ahora buena parte de su lucha: “No descansaremos hasta que se haga justicia, con un castigo ejemplar, con estos asesinos de la carretera”.
Lo difícil para la madre de Marta fue volver a pasar dos veces al día por el sitio del choque para ir al trabajo