Otra derrota muy dolorosa
La inferioridad en el rebote y la falta de intensidad dejaron al Barça sin opciones
El Barcelona Lassa visitaba la Fonteta en un buen momento. Por primera vez en toda la temporada había tenido una semana para entrenarse con calma, y el Valencia todavía se lamentaba por el desenlace de la Eurocup, cuando cedió de forma inesperada el título ante el Unicaja en un partido que tenía muy controlado. Sin embargo, los barcelonistas cayeron de nuevo con mucha claridad y, además, perdieron el
average, incapaces de defender los doce puntos que habían obtenido en el Palau Blaugrana en el mes de diciembre. Peor, imposible. “No puedo explicar el bajón del último cuarto, pero con el porcentaje de tiro que hemos hecho es muy difícil ganar fuera de casa”, se sinceró Tomic en declaraciones a RAC 1.
La intensidad de los valencianos, que empezaron mal pero fueron recuperando sensaciones durante el partido, fue muy superior a la de los catalanes, que estuvieron muchos minutos por detrás pero se hundieron definitivamente en el último cuarto (2516). Una vez más, el Barça no estuvo a la altura de lo que se esperaba y no compitió. Un solo aspecto de la estadística demuestra lo que fue el equipo de Bartzokas, arrasado en el rebote (40 contra 26), especialmente el ofensivo, con 14 locales y únicamente 5 visitantes. En esta faceta destacaron Thomas (4) y Oriola (3), este decisivo en el tramo final para acabar siendo el máximo anotador del partido con 14 puntos.
“La pregunta del año es ‘qué está pasando’. Si lo supiéramos, ya lo habríamos solucionado”, explicó Claver en su regreso a la pista donde se formó. El valenciano empezó bien, con dos triples en el primer cuarto, pero luego se diluyó en la mediocridad general en un bloque que a partir del empate a 16 siempre estuvo por detrás en el marcador.
Durante una larga fase del partido y ante un adversario con dudas (Dubljevic jugó 14m05s) dio la sensación de que en ningún caso se le podía escapar al Barcelona el average. Pero, claro, nadie podía esperar un último cuarto tan deficiente, en el que ni siquie- ra la defensa estuvo a la altura. A partir del 53-48, los barcelonistas encajaron un parcial de 23-11 que les dejó fuera de combate. “Ha sido una derrota dura porque nuestro objetivo es acabar entre los tres primeros”, reconoció Diagné, protagonista involuntario al romper un tablero en un mate y obligar a que el encuentro se detuviera cerca del descanso.
“A pesar de las bajas, tenemos que jugar mejor, especialmente en ataque”, dijo Bartzokas, que intenta transmitir a sus jugadores “la importancia de luchar por cada balón”. Ayer, su equipo perdió 16, una cifra muy alta, y anotó sólo 59 puntos. Sin comentarios.