El turista que viene del frío
El volumen de reservas apunta a un crecimiento del 50% de estos turistas
Tras años de caída por el conflicto ucraniano y la depreciación del rublo respecto al euro, las cifras indican que el turismo ruso reaparece en Barcelona, quintuplicando sus reservas respecto a la crisis.
“El problema que ahora se plantea es que no haya suficiente disponibilidad de camas; hay mucha demanda de otros países”
Las reservas se han multiplicado por cinco y las previsiones son más que optimistas. Si en el 2014 y el 2015 la llegada de turistas rusos cayó en picado en Catalunya, todo indica que la recuperación será igual de drástica. Uno de los principales turoperadores de este mercado, Natalie Tours, ya ha vendido a estas alturas del año un 72% de las plazas que gestionó durante todo el 2016. “El problema que ahora se plantea es que no haya suficiente disponibilidad de habitaciones por la gran demanda que también se está registrando de otros países”, advirtió ayer el presidente del grupo de agencias Natalie Tours, Vladímir Vorobiev.
Tras unos años de euforia en que el mercado ruso creció exponencialmente hasta superar el millón de turistas en el 2013, se tocó fondo en el 2015 (con una caída acumulada del 60%). El sector hotelero, especialmente en la Costa Daurada, pudo compensar aquel batacazo con el incremento de reservas de los británicos. La situación internacional jugó en detrimento de destinos como Turquía, Egipto o Túnez y a favor de Catalunya. En el 2016 el mercado británico siguió creciendo y las previsiones siguen siendo optimistas para este año hasta el punto de que las reservas de los turoperadores de Gran Bretaña e Irlanda se han avanzado y han crecido respecto al 2016, lo que puede frenar ahora las expectativas de los operadores rusos.
“Si seguimos a este ritmo, vamos a recuperar seguro la situación del 2014; duplicaremos como mínimo las cifras del año pasado y se podrían triplicar si hubieran más camas disponibles”, insistió Vorobiev, quien reconoció que Natalie Tours –que llegó a controlar en los años más eufóricos el 50% del mercado ruso en Catalunya– ya está trabajando con el sector hotelero para recuperar plazas en vistas al próximo año para tratar de superar el millón de visitantes en el 2018.
“Otros mercados han crecido en Catalunya porque han descartado destinos; los rusos dejaron de venir por la devaluación del rublo, pero es un turista fiel”, insistió Vorobiev, que destacó los puntos fuertes de sus clientes: estancias más largas y más gasto que otros competidores, como los británicos (ahora los más numerosos en la Costa Daurada): “Conseguimos llegar al mercado porque estábamos dispuestos a pagar más que el británico y eso hará que volvamos los próximos años”.
Otro de los factores que pueden frenar la recuperación son las dificultades para tramitar visados en algunas regiones rusas, “lo que nos ha obligado a suspender algunos vuelos chárter, pero es un problema que confiamos solventar a lo largo de este año”, afirmó Vorobiev. Natalie Tours gestiona vuelos chárters a Catalunya desde ocho ciudades rusas y bielorrusas con vuelos regulares no directos desde otras 30 ciudades. Representantes de 200 agencias de viajes de estas zonas participan esta semana en el World2Meet para conocer las novedades de la Costa Daurada, como el parque temático Ferrari Land, y tienen previsto visitar también Barcelona o Montserrat.