Una plaza dignificará un tramo de la muralla romana en Ciutat Vella
El espacio se urbanizará en la calle Sotstinent Navarro y servirá también de patio de la escuela Baixeras
Un tramo de la muralla romana de Barcino cobrará más relevancia en Ciutat Vella con la urbanización de una plaza en un solar de la calle Sotstinent Navarro, paralela a Via Laietana.
Las obras empezarán a finales de julio y la plaza se espera acabar para mediados de abril del próximo año. En horario lectivo, servirá de patio de la escuela Àngel Baixeras, por lo que el proyecto se ha diseñado de acuerdo con este centro, según informó ayer el Ayuntamiento.
Esta será la segunda actuación del proyecto que pretende crear el paseo de la Muralla romana, así que la intervención urbanística se hará con materiales y acabados similares a los de la plaza Ramon Berenguer, situada un poco más arriba.
El tramo de muralla quedó al descubierto hace unos cinco años con el derribo de dos edificios. El nuevo espacio público, un rectángulo irregular, tiene una superficie de 909 metros cuadrados y queda delimitado por la muralla, las calles Sotstinent Navarro y Baixada del Caçador y una medianera. La urbanización tendrá que salvar el desnivel que hay entre la calle Sotstinent Navarro y el pie de la muralla de entre 2,5 y 3 metros. Por este motivo, la plaza se hará un poco deprimida res- pecto a la calle. La parte plana (la mayor parte) se pavimentará y en el lado de la muralla, con ligera pendiente, habrá una franja verde y de tierra, explicó el arquitecto encargado del proyecto, Josep Llinàs.
En el área se plantarán cinco árboles; habrá un pequeño espacio cerrado que se habilitará como almacén y lavabos del patio escolar y, para poder cerrar la plaza cuando sea de uso escolar, se colocará una verja de barrotes de un metro de altura con dos accesos. En intervenciones posteriores se debería restaurar el tramo de muralla, de una veintena de metros y bastante altura, así como actuar sobre la medianera, seguramente cubriéndola con vegetación, pues ambas cosas no se incluyen en el proyecto actual.
La intervención tiene un presupuesto de 1,1 millones de euros. Era una vieja reivindicación de la escuela Baixeras disponer de un patio en el solar, pues hasta ahora utilizaban para el recreo la azotea. El gobierno municipal abrió un proceso participativo para que la comunidad educativa (incluidos los alumnos) y los vecinos dieran su punto de vista sobre la urbanización. El proyecto inicial de Llinàs proponía integrar más la escuela con su nuevo patio, lo que de momento queda en el aire.
En esta zona, a diferencia de en Ramon Berenguer, se construyeron edificios de viviendas aprovechando la muralla –una parte de la que ahora se dignifica es pared de un hotel–, pero estudios arqueológicos han mostrado que esta continúa en algunos tramos, hasta la plaza Traginers y más allá , que querrían recuperarse.
Las excavaciones arqueológicas realizadas al pie de la muralla, en el solar, ya estudiadas, quedarán cubiertas (se hallaron restos de muros). En estos estudios arqueológicos, dentro del Pla Bàrcino, los investigadores concluyeron que en tiempos de la ciudad romana el mar debía llegar a los pies de la muralla en esta zona y que la Via Laietana era una riera.
MURALLA VIVIDA
En esta zona, la muralla forma parte de la pared de edificios de viviendas
CALENDARIO
Las obras, un proyecto del arquitecto Josep Llinàs, se prevén acabar en abril del 2018