Un nuevo futuro laboral
Personas en riesgo de exclusión social encuentran empleo tras formarse en cursos de la Obra Social La Caixa
Llega el momento de reorientar la vida y hacer el tan esperado salto hacia el mercado laboral pero lo que podría ser una verdadera oportunidad se convierte para las personas en riesgo de exclusión social, ya sea por una discapacidad física, psíquica o un trastorno mental, porque son parados de larga duración, jóvenes con dificultades o fueron reclusos o víctimas de violencia doméstica, por citar algunos casos, en un auténtico trasiego.
Es lo que les ocurrió a Jordi, Wendy y Carles. Pero ellos, a pesar de su situación personal, no se dieron por vencidos e hicieron un primer paso para poder hallar un trabajo: apuntarse al itinerario del programa Incorpora de la Obra Social La Caixa, que ofrece orientación, apoyo y acompañamiento a la inserción laboral a través de formación, o al programa Reincorpora, que facilita itinerarios de inserción social y laboral a personas reclusas que están en la fase final de su condena. Y consiguieron sus objetivos: ganar autoestima, cumplir con su compromiso y responsabilidad y, en la mayoría de los casos, obtener un contrato.
Jordi, de 34 años y vecino de Corçà, que se sentía saturado y estancado en casa, no falló ni un día en los dos meses que duró la formación de atención al cliente y comercio en la fundación Gentis, una de las más de cien entidades que colaboran con dichos programas, y pudo poner en juego sus capacidades en la gasolinera de su municipio, donde hizo las prácticas. “Después de dos contratos de tres meses, me cogieron fijo”, comenta ilusionado Jordi, que tanto ordena la tienda como atiende a los clientes en la caja.
Un total de 9.349 usuarios que finalizaron el trayecto Incorpora en Catalunya, que también es un programa de intermediación porque pone en contacto estos candidatos con empresas, consiguieron un empleo el año pasado (7.412 en el 2015). En Girona concretamente fueron 998, se trata del techo más alto alcanzado hasta ahora en la provincia desde que, hace 10 años, se puso en marcha el programa.
Mediante el Reincorpora, un total de 385 de las 476 personas que hicieron el itinerario obtuvieron empleo (299 en el 2015). Marc Simón, director corporativo del Área Social de la Fundació Bancària La Caixa, juzga positivas estas cifras. “La garantía de que vamos por el buen camino es que más del 60% de las empresas que han contratado a alguna persona del programa repiten”, subraya Simón.
¿Y qué explica el éxito? El coordinador de Incorpora Girona, Roger Casero, lo atribuye a la formación que reciben estas personas porque supone “una palanca que les ayuda a verse más capaces y seguras para reorientarse a nivel laboral o simplemente hacer el paso”. Pero también a las prácticas. Felip Allué, prospector Incorpora de la fundación Gentis, añade que “son vitales para la visualización de los alumnos. La firma conoce a una persona que no tenían pensado contratar y terminan por hacerlo. Si no hubiera hecho las prácticas, seguramente no la habrían contratado”.
Carles, de 57 años, que era comercial, ha podido reorientar su futuro laboral a través de un curso de ayudante de cocina –una de sus pasiones– en la fundación Oscobe, y Wendy, de 24 años, tras formarse de camarera en la misma entidad, que le permitió tener un conocimiento mínimo del oficio, trabaja en un restaurante de comida rápida en Girona. “Si tras las prácticas no se quedan en la empresa, se les apoya para que encuentren otra”, precisa Lídia Pérez, técnica Reincorpora de la fundación Oscobe. Los empleos a los que pueden optar los usuarios después de la formación son, entre otros, de camarero, mozo de almacén, auxiliar de geriatría o servicio de limpieza.
“Más del 60% de las firmas que han contratado a algún usuario del programa repiten; vamos por buen camino”