Bruselas facilita la inyección de ayudas de Estado a aeropuertos
Invertir en puertos, aeropuertos regionales, iniciativas culturales y regiones ultraperiféricas será un proceso más ágil y sencillo. La inyección de subsidios públicos no deberá ser notificada previamente para su autorización a la Comisión Europea, como ocurría hasta ahora. El nuevo reglamento comunitario sobre ayudas de Estado libera a estos sectores de la necesidad de pasar el La reforma permitirá “ahorrar tiempo” a los actores económicos, celebra Vestager filtro previo de Bruselas con el fin de “ahorrar tiempo” a los actores económicos, que tienen así mayor seguridad jurídica sobre sus inversiones, y permitir a la Comisión Europea “centrar su atención en aquellas medidas de ayuda estatal con mayor impacto sobre la competencia”, explicó ayer la comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager. Las ayudas podrán verificarse a posteriori si hay indicios de que puede haber habido un falseamiento de la competencia.
La medida se aplicará a los aeropuertos regionales con un tráfico anual inferior a los tres millones de pasajeros, unos 420 aeródromos en total actualmente en la Unión Europea, el equivalente al 13 % del tráfico aéreo comunitario. En el caso de los aeropuertos con menos de 200.000 viajeros al año (casi la mitad del total), el reglamento permite a las autoridades públicas financiar los costes de explotación.
En cuanto a los puertos, los Estados pueden invertir hasta 150 millones de euros en el caso de los marítimos y hasta 50 millones en los interiores sin necesidad de control previos por parte de la Comisión, así como correr con los costes de dragado y accesos. La simplificación de las normas alcanza también a la cultura. En adelante, Bruselas sólo investigará los casos de mayor envergadura que puedan ser considerados ayudas de Estado (poco habitual en este sector) y para las instalaciones deportivas de usos múltiples. La reforma reduce también las trabas administrativas a las compensaciones a empresas en regiones ultraperiféricas.