Un paso mortal en vías de solución.
La ansiada obra durará más de tres años y costará 300 millones de euros
El ministro de Fomento anunció ayer que la obra para soterrar Rodalies a su paso por Montcada i Reixac comenzará en el 2020 y costará 300 millones. De ser así, se cumpliría una promesa del 2007.
El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, anunció ayer que las obras para soterrar cerca de cuatro kilómetros de las líneas R2 y R11 de Rodalies entre el barrio de Vallbona de Barcelona y la autopista C-33, a su paso por Montcada i Reixac, comenzarán en “el primer trimestre del 2020 y costarán cerca de 300 millones de euros”. La actuación se alargará 38 meses, poco más de tres años, por lo que concluiría a mediados del 2023, si no hay imprevistos.
Después de años de movilizaciones, Fomento prometió esta actuación en el 2007, aunque nunca se llegó a empezar por falta de inversión. Ayer, sin embargo, la alcaldesa de Montcada i Reixac, Laura Campos, emocionada, aseguró que por fin “se hace justicia histórica a este municipio, muy maltratado y cuarteado, y a nuestras víctimas”. Destacó la buena sintonía y la “predisposición” para avanzar en las negociaciones entre Fomento, Generalitat, Montcada y Barcelona, una situación muy diferente de la de hace pocos años cuando el Ayuntamiento llegó a denunciar al ministerio y a Adif ante la Audiencia Nacional. Aun así, Campos aseguró al ministro que “estaremos ojo avizor para que, esta vez sí, los compromisos y los plazos se cumplan”.
Antes de iniciar el soterramiento se encargarán los estudios informativos, con los consiguientes estudios de impacto ambiental, y la redacción del proyecto, lo que, según De la Serna, obliga a retrasar el inicio de los trabajos. “Se trata de “una obra de mucha envergadura y hay que hacerla muy bien. Es una actuación de justicia para reparar una cicatriz” y que servirá para “devolver la dignidad perdida a mucha gente”, según el ministro.
Una comisión integrada por Fomento, el Departament de Territori y el Ayuntamiento de Montcada examinará cada tres meses la evolución del proyecto. El soterramiento se hará sin tuneladora, con el método de pantallas, y en diferentes fases para que no afecte a la circulación de los trenes.
En Montcada, calculan que 169 personas han fallecido atropelladas desde que los trenes circulan desde el siglo XIX por la ciudad, incluidos suicidios. En los últimos años, el goteo ha sido constante: la última muerte se produjo el lunes. En varias ocasiones, el Ayuntamiento y la Plataforma Tracte Just-Soterrament Total han culpado a Fomento directamente de los atropellos. Ante esta acusación, De la Serna lamentó que Montcada “no es una excepción” en cuanto a los fallecimientos producidos en las vías. “Ocurre con mucha frecuencia, y es inadmisible. Nuestra responsabilidad es que dejen de pasar estas situaciones y hacer un proyecto que traiga seguridad”.
El conseller Josep Rull confirmó que en los 300 millones de inversión se incluirá una partida para abrir un tercer carril en el mismo trazado que se entierra. Es una propuesta es de la Generalitat que servirá para “minimizar afectaciones en caso de incidencias y que permitirá que circulen trenes semidirectos” en Rodalies, según Rull. La teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Janet Sanz, también se mostró muy contenta por el anuncio del soterramiento porque “es una mejora en la calidad de vida de los vecinos y de la comunicación en transporte público para el área metropolitana”.
Plena satisfacción del municipio afectado, de Barcelona y de la Generalitat por el anuncio del ministro