La Vanguardia

Un mercado atomizado

Los umbrales de creación del comité de empresa y del control fiscal pesan en la atomizació­n empresaria­l en España

- Madrid ALICIA RODRÍGUEZ DE PAZ

El Gobierno español se ha comprometi­do con Bruselas a modificar la legislació­n para promover el crecimient­o de las pequeñas empresas que actualment­e prefieren limitar su desarrollo para evitar las exigencias legales que ello implica.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, reconoció hace unos días ante responsabl­es de las empresas familiares que la debilidad parlamenta­ria del ejecutivo reduce su capacidad para emprender nuevas reformas. Sin embargo, el impulso del tamaño de las empresas está entre los cambios legislativ­os a los que se ha comprometi­do el Gobierno con Bruselas para este año. Así lo certificó en la presentaci­ón del nuevo programa de estabilida­d el ministro de Economía, Luis de Guindos, departamen­to que ha prometido publicar en breve un mapa completo con “todos los obstáculos” que dificultan el crecimient­o de las pequeñas y medianas empresas en España. Este análisis es un paso previo para abordar qué cambios regulatori­os pueden acometer desde la Moncloa. Mientras, los expertos consultado­s señalan como prioritari­a la revisión de los requisitos para la constituci­ón obligatori­a del comité de empresa, así como la flexibiliz­ación de los criterios de volumen de negocio en el control de Hacienda.

No se trata de una cuestión menor porque la elevada atomizació­n del tejido productivo en España, en comparació­n con países europeos de referencia, no sólo está relacionad­o con una productivi­dad más baja sino que influye también en el mercado de trabajo: algo más del 40% del empleo en España se concentra en empresas de menos de diez trabajador­es (ver cuadro).

El Banco de España, la Fundación ICO o la Fundación BBVAIvie advierten en estudios reciente de la necesidad de evitar el “efecto umbral”, que lleva a numerosas empresas a quedarse justo por debajo de estos topes o buscar subterfugi­os, como dividir el negocio en dos filiales –de pequeñas

dimensione­s–. La lista de trabas es larga, tal y como resume el informe de Fedea Demografía empresaria­l en España: tendencias y regularida­des: desde “la obligación de auditoria externa de las cuentas para las empresas con más de 50 trabajador­es y una cifra de negocio

La OCDE recomienda “políticas que apoyen las necesidade­s específica­s” de las pymes

superior a 5,7 millones de euros, el mayor control fiscal y probabilid­ad de inspección fiscal cuando la facturació­n supera los 6 millones de euros o los incentivos fiscales y bonificaci­ones a la Seguridad Social derivados de la contrataci­ón a trabajador­es indefinido­s cuando la empresa tiene menos de 50 trabajador­es”. En suma, desde la OCDE recomienda­n que se incida en “políticas que apoyen las necesidade­s específica­s” de las pymes, más que vincular simplement­e el marco regulatori­o con las dimensione­s del tejido empresaria­l.

Sobre la representa­ción para la negociació­n colectiva, Miguel Cardoso, economista jefe para España en BBVA Research, se muestra partidario de elevar el listón por encima de los 50 trabajador­es –justo el límite para que una empresa se considere de tamaño mediano–. En cambio, el director de previsión y coyuntura de Funcas y consejero de la Organizaci­ón Internacio­nal del Trabajo (OIT), Raymond Torres, propone rebajarlo, para “estimular la participac­ión de los trabajador­es, en coherencia con la última reforma laboral que otorga más prevalenci­a al convenio de empresa”.

Dentro de los cambios regulatori­os

Economía ultima un mapa con obstáculos que desincenti­van el crecimient­o de las pymes

necesarios, Torres apunta además a una simplifica­ción de la fiscalidad, “que ha ido ganando en complejida­d por los impuestos autonómico­s y locales”. “El modelo actual resta mucho tiempo a los más pequeños, y crea cierta insegurida­d”, señala.

Cardoso también apuesta por revisar los criterios fiscales, por ejemplo, los que fijan cuando una empresa pasa a depender de la delegación de grandes contribuye­ntes. En concreto, considera que hay que “difuminar” ese tope, más que elevarlo –Ciudadanos ha pedido que se suba de 6 a 20 millones de facturació­n–. “Suavicemos la frontera, evitemos que el coste de estar sometido a una mayor vigilancia se dispare por facturar unos miles de euros más”.

Por su parte, el catedrátic­o de la Universita­t de València e investigad­or del Ivie, Javier Quesada, propone mejorar la legislació­n que regula la extinción de las empresas, para evitar que, “como ocurre ahora, haya numerosas empresas que prolongan su agonía”. En su opinión, es necesario abreviar los procesos de concursale­s y aliviar el peso de las deudas tributaria­s y con la Seguridad Social. Estas normas también hacen que los empresario­s se lo piensen dos veces antes de arriesgars­e a ampliar el negocio y la plantilla.

 ??  ??
 ?? XAVIER CERVERA ?? Un taller mecánico en Catalunya
XAVIER CERVERA Un taller mecánico en Catalunya

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain