“Quiero ganarlo todo”
Valverde sublima el espíritu de equipo y promete ambición
“Estoy deseando que empiece el primer día para ponerme el chándal y ponerme a entrenar”, dice Ernesto Valverde, que se muestra preparado y ambicioso y, sobre todo, exalta el espíritu de grupo como clave para una trayectoria de éxito. En una entrevista a Barça TV, el nuevo técnico se presenta polivalente y poco dogmático en cuestiones tácticas, pero considera innegociable la intensidad en el juego y la ambición. Relativiza la trascendencia de su llegada al banquillo del Camp Nou. “Es un momento importante y sé la importancia que tiene, pero no pienso que sea un momento culminante en mi carrera”, afirma.
Aposentado en una silla en medio del terreno de juego, Valverde va hilvanando argumentos sin estridencias pero construidos sólidamente. Se ve que el discurso no es improvisado sino producto de años de fútbol, en el terreno de juego y en los banquillos. No aparece ningún signo de vértigo ante lo que considera “un reto, una responsabilidad y un sueño”. “Reto porque es un desafío, responsabilidad porque el Camp Nou estará lleno de gente que espera mucho de nosotros y por poder devolver al club la confianza y sueño porque quiero transmitirle todo lo que siento a la afición y que pueda vibrar con el equipo”.
“¡Tranquilo no estoy, eh! Puede aparentar que estoy tranquilo pero no lo soy tanto”, esgrime antes de insistir en el eje de su discurso: el colectivo. “Yo le doy mucha importancia al grupo porque yo sé que estamos expuestos a muchas cosas. A que la pelota entre o vaya fuera .... a veces dentro de todo el ruido que se genera en un club hay cosas que son más ciertas o menos ciertas, más justas o menos justas. Somos una gente que tenemos grandes privilegios y a la vez se
EL CARÁCTER nos exige mucho. Tenemos que estar preparados. El estar todos juntos, el que la fuerza del grupo te ayude a sobrellevar los malos momentos y a apaciguar la euforia cuando es desmedida, está bien”.
Pero el entrenador del Barça no vive de reflexiones, sino de hechos, y Valverde será juzgado no por su discurso irreprochable sino por sus resultados. “He tratado siempre de cerrar los grupos, de tener un buen ambiente de trabajo pero también exigente. Mi intención es siempre ganarlo todo. Yo no vengo aquí a no ganar todos los partidos que tenga delante, y si tienes un buen grupo que te empuje es más fácil de conseguir”.
Para Valverde, el mejor sistema es el que hace que los jugadores se encuentre cómodos dentro del equipo. Recuerda que, en función de las existencias, en el Athletic ha empleado un 4-23-1, a veces un 4-4-2 y, más raramente, un 4-3-3 como es habitual en el Barça. Más importante que el dibujo, indica, es la actitud colectiva que desea: “Quiero un espíritu de equipo que contagie a la gente, un juego que sea intenso, un equipo que intente llevar siempre el peso del juego, que tenga una ambición acorde a lo que se nos pide”.
Luis Enrique atribuyó su cansancio a la dedicación total al cargo. Valverde sabe lo que le espera: “En mi casa no se habla de fútbol, lo cual es de agradecer. Sé que el fútbol lo inunda todo, que el trabajo es absorbente, que la presión mediática es absorbente”.
“Un equipo que sea intenso, que intente llevar siempre el peso del juego y tenga ambición” “¡Tranquilo no, eh! Puede aparentar que estoy tranquilo, pero no lo soy tanto”