La oposición enfurece al PP al unirse para investigar a fondo sus finanzas
Maillo dice que la comisión de investigación es ilegal por ser una “causa general”
Nervios e irritación en el puente de mando. La corrupción escala posiciones en el panteón de preocupaciones de los españoles, y las alegrías parlamentarias del Gobierno –la última, la aprobación de los presupuestos generales del Estado– se convierten en pesadillas en apenas una semana: el martes el PSOE cambiaba de idea y permitía que se ampliaran las comparecencias y alcance de la comisión Fernández Díaz –que investiga una supuesta policía política en el Ministerio del Interior– y ayer todos los grupos salvo el PP actuaban de forma coordinada en el Congreso para pactar los trabajos de la comisión de investigación sobre la financiación de los populares y que indague sin un límite temporal o administrativo previo, como pretendían marcar los populares, que pedirán el amparo a la Mesa.
El coordinador general del PP, el sobrio zamorano Fernando Martínez-Maillo, de común sosegado e irónico, se presentaba ante los medios furioso por una decisión que, a su juicio, convierte en ilegal la comisión de investigación pues la articula como “una causa general contra el PP”. MartínezMaillo habló de “triple alianza” –PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos–, pero omitía que el resto del arco parlamentario, Esquerra, PNV y el grupo mixto, suscribió la decisión y aprobó tanto el plan de trabajo como las primeras comparecencias, que serán las de los tesoreros del PP, empezando por Luis Bárcenas (en principio, el 26 de junio) y acabando por la actual, Carmen Navarro, pero que incluye a Álvaro Lapuerta, Rosendo Naseiro y Ángel Sanchís.
“Es la primera vez que en democracia se abre una causa general contra un partido; esta es la comisión de la Inquisición y ya ha dictado sentencia. Lo demás será un paripé. No les interesa saber la verdad, sólo intentan desgastar al PP y tapar sus propias vergüenzas”, recitaba un acalorado Maillo, quien se preguntaba “qué pinta Ciudadanos de la mano de los radicales” y anunciaba que el PP sabrá responder en la comisión de investigación del Senado (donde dispone de mayoría absoluta). “Les sacaremos las vergüenzas”, prometió. La comisión citará a Bárcenas el 26 de junio y al resto de los tesoreros populares en julio El partido pedirá amparo a la Mesa del Congreso y no descarta acciones judiciales
Desde la oposición, Isabel Rodríguez (PSOE), Carolina Bescansa (Unidos Podemos), Toni Cantó (Ciudadanos) y Joan Tardà (ERC) coincidían en criticar la actitud obstruccionista y airada de Martínez-Maillo en la reunión de la comisión, una actitud que, según Tardà y Bescansa, llegó a las amenazas, más o menos veladas, incluso con eventuales denuncias contra los comisionados y el letrado de las Cortes que los asiste. “He visto al PP en la montaña, durito y amenazando”, decía el republicano.
Con el aguacero de casos de corrupción que no amaina, encuestas que revelan una hemorragia de votos, el cambio en la dirección del PSOE y un endurecimiento de la posición de Ciudadanos, que parece haber olido sangre electoral en el PP, el Congreso se ha convertido en territorio indómito para el partido del Gobierno, apenas cinco días antes de que se debata en el hemiciclo la tercera moción de censura de la democracia.