Derecho a tener una vivienda digna
La Generalitat triplica en cinco años las ayudas económicas a entidades que gestionan pisos sociales
El Govern concede ayudas a 1.973 pisos destinados a personas en situación de vulnerabilidad La aportación pasa de los 1.200 euros por vivienda y año de 2016, a los 1.800 en 2017
Garantizar una vivienda digna a todos los ciudadanos es uno de los objetivos del Govern de la Generalitat. Para que ello sea posible, este año ha firmado un acuerdo con entidades sociales y ayuntamientos para conceder ayudas a 1.973 pisos destinados a personas en situación de vulnerabilidad.
Este 2017, la aportación es de más de 3,55 millones de euros, ampliables a 4,36 millones en previsión de futuras incorporaciones a lo largo del año. El Govern, pues, ha más que triplicado en cinco años el importe que destina a estas ayudas, ya que en 2012 fue de 1,07 millones de euros.
LAS APORTACIONES AUMENTAN UN 50%
Otra de las novedades de este año es que la aportación aumenta en un 50% y pasa de los 1.200€ por vivienda y año de 2016. a los 1.800€ de este 2017, lo que permite reforzar y apoyar las tareas de acceso y mantenimiento de los inmuebles de inserción.
Estas ayudas se destinan a la Xarxa d’habitatges d’inclusió y son aportadas por la Generalitat, las entidades sociales y los ayuntamientos. Estos pisos se destinan principalmente a personas sin hogar, víctimas de violencia de género y personas que siguen programas de tratamiento de adicciones y/o con trastornos mentales. Asimismo, también se destinan a familias con pocos recursos y en riesgo de exclusión, jóvenes que participan en programas de inserción social o viven en situaciones que requieren una especial atención.
TRABAJO CONJUNTO
El Govern, a través de la Agència de l'Habitatge de Catalunya, coordina y apoya la Xarxa d’Habitatges d’Inclusió de Catalunya. Por un lado, aporta ayudas para los gastos del hogar (pago del alquiler y de servicios básicos como agua, luz, gas, etc.), y, por otro, cede pisos del parque público para que formen parte de la red.
Para ello, en 2016 la Generalitat y la Taula d’Entitats del Tercer Sector Social de Catalunya firmaron un protocolo de colaboración por el que la Agència de l'Habitatge de Catalunya cedía 250 pisos para destinarlos a alquiler social, con la previsión de doblar esta cifra a finales de 2017. Y siempre con el objetivo final de ofrece un hogar digno a todos los ciudadanos.