El Govern sitúa al cargo querellado por las urnas al frente del gabinete jurídico
El secretario general de Governació, nuevo director de los abogados de la Generalitat
El único alto cargo de la Generalitat que hasta ahora ha sido objeto de querella por parte de la Fiscalía a causa del proceso independentista ha sido promocionado por el Govern. El que desde el 2015 era secretario general del departamento de Governació, Francesc Esteve, incluido junto a la consellera Meritxell Borràs en la querella por el acuerdo marco sobre la homologación de empresas para el suministro de urnas a la Generalitat, fue nombrado ayer director del gabinete jurídico, dependiente del departamento de Presidència.
El gabinete jurídico es el encargado del asesoramiento en materia de derecho y de la representación y la defensa jurídica del Govern y está integrado por todos los abogados de la Generalitat, coordinados por el director, que es el puesto que pasa a ocupar Francesc Esteve. Licenciado en Derecho por la Universitat de Barcelona, y diplomado en Derecho Urbanístico y en Gestión y Derecho Local, y después de una dilatada carrera en la administración local, su papel en las reuniones del Consell Tècnic –que agrupa a los secretarios generales de todos los departamentos– no ha pasado inadvertido en la presidencia de la Generalitat, que le ha promocionado a la nueva responsabilidad, en lo que se interpreta como un reforzamiento de su figura a raíz de la querella. Francesc Esteve (Martorell, 1970) es hijo del expresidente de la Diputación de Barcelona y exalcalde de Martorell, el histórico dirigente de CDC Salvador Esteve, miembro del patronato de la Fundació Carles Pi i Sunyer, de estudios autonómicos y locales, y tiene plaza de funcionario en el Ayuntamiento de Les Franqueses del Vallès, en el que ejerció de secretario.
La designación de Francesc Esteve como nuevo máximo responsable de los abogados de la Generalitat –que es un cargo asimilado al
Presidència lleva a Margarida Gil, esposa del conseller de Interior, al Consell de Garanties Estatutàries
de secretario general de Presidència o secretario del Govern– permite, por otro lado, desencallar un nombramiento que hacía más de un año que estaba pendiente. Es el del miembro del Consell de Garanties Estatutàries que correspondía cubrir al Govern –el Parlament tiene pendientes, por su parte, tres relevos– y que estaba ejerciendo, a pesar de tener el mandato caducado, Eliseo Aja y para el que finalmente ayer fue designada Margarida Gil (Vandellòs, 1963), licenciada en Derecho por la Universitat de Barcelona y esposa del conseller de Interior, Jordi Jané, que desde el 2011 era precisamente la directora del gabinete jurídico de la Generalitat. Y el cambio de Francesc Esteve conlleva aún más nombramientos: el de Meritxell Masó (Girona, 1965) para sustituirle en la secretaría general de Governació y el de Ester Obach (Barcelona, 1963) para reemplazar a ésta en el puesto de secretaria de Administració i Funció Pública que ocupaba hasta ahora.
La cadena de nombramientos que el Govern aprobó en su reunión de ayer se completó, entre otros, con el de Núria Badala (Barcelona, 1978) como presidenta del Institut Català de les Dones. La hasta ahora directora ejecutiva del organismo sustituye a Teresa Pitarch, que fue relevada por la consellera de Presidència, Neus Munté, por “pérdida de confianza” después de darse de baja del PDECat en disconformidad con la presión ejercida sobre Germà Gordó para que dejara el escaño en el Parlament tras ser imputado por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) en la trama del 3% y la presunta financiación irregular de CDC.