El aceite italiano, en mínimos
La producción olivarera cae un 61% esta temporada y en España, un 8%
Redacción y agencias
La sequía deja otra mala temporada para el aceite. Según el Consejo Oleícola Internacional, la producción en España caerá un 8% este año, hasta los 1,28 millones de toneladas pero Italia vivirá una debacle: la producción caerá un 61% respecto a la temporada 20152016, por debajo de las 185.000 toneladas. Se trata de la campaña más baja de las últimas décadas, lo que obliga aún más a Italia a recurrir a la materia de otros sitios como España, que produce la mitad del aceite del mundo.
Fuentes de esta organización detallaron a Efe que ese mínimo en la serie histórica contrasta con las 300.000 o 400.000 toneladas que produce el país de media, por lo que auguran una disminución de sus exportaciones y un ligero aumento de las importaciones respecto a la campaña anterior. En concreto, Italia suele destinar 600.000 toneladas al mercado interno y otras 400.000 al exterior.
Mario Rocchi, presidente de la asociación italiana de la industria oleícola Assitol, explica que superan ese déficit productivo importando materia prima de toda la cuenca del Mediterráneo, sobre todo de España, pero también de Grecia, Portugal y Túnez. El sector, que todavía recuerda la mala cosecha de dos años atrás, ya se lamenta de otra temporada para el olvido. “Esperábamos que el 2014 fuera el annus horribilis de nuestra producción olivícola, con solo 200.000 toneladas pero el 2016 también ha sido negativo”. Sólo en el 2014 las compras de aceite de oliva español rondaron las 550.000 toneladas, según estadísticas oficiales italianas. Para este año todavía no hay datos cerrados de comercio exterior, pero los provisionales de los tres primeros meses reflejan ya importaciones de ese tipo en torno al medio millón de toneladas. Otros cálculos ofrece el ministerio español de Agricultura, que estima que de octubre del 2016 a febrero de 2017 las ventas de aceite de oliva a Italia aumentaron un 69% respecto a los mismos meses de la campaña precedente, hasta casi 180.000 toneladas.
En cualquier caso, la baja producción italiana no es un caso aislado. Se espera que en todo el mundo se produzca un 20% menos de aceite de oliva esta temporada, sobre todo por los descensos previstos en los países del sur de Europa. El director general del consorcio de olivicultores italianos Unaprol, Pietro Sandali, echa la culpa de la situación en su país a la sequía: “En los últimos tres o cuatro años hemos tenido una producción con muchos altibajos ligados fundamentalmente al clima”, argumenta.
Mientras la industria sigue cuantificando los daños, los precios han ido subiendo progresivamente en los últimos meses: a finales del pasado mayo se pagaba a los productores italianos 5,9 euros por un kilo de aceite de oliva extra virgen, un 66% más que un año antes. En España el kilo estaba a casi cuatro euros, el 36% más, según el Consejo Oleícola, que mide así el pulso del mercado en los principales productores.