El RACC plantea un permiso para conducir a los 17 años con un tutor
Los jóvenes podrían conducir acompañados de un tutor para ganar experiencia al volante, siempre de día y sin amigos en el coche
Las cifras de accidentalidad viaria en España y Catalunya llevan tres años estancadas después de más de una década de mejora. Para tratar de recuperar la tendencia a la baja del número de muertos en las carreteras, el Reial Automòbil Club de Catalunya (RACC) propone que se implante un sistema de acceso gradual al permiso de conducir a partir de los 17 años.
Se trataría de permitir la conducción siempre y cuando el joven de 17 años fuese acompañado de su padre, madre o un tutor legal y se cumpliesen unos condicionantes: ni una gota de alcohol, prohibido conducir de noche y en ningún caso hacerlo acompañado de varios jóvenes que le puedan distraer. Según el director técnico de la fundación RACC, Lluís Puerto, “la experiencia es el factor más determinante en el descenso de la accidentalidad de los conductores novatos”. Los estudios realizados sobre estas iniciativas aseguran que la suma de kilómetros al volante es el elemento que tiene mayor incidencia en la reducción de la accidentalidad entre los novatos. La combinación de madurez y experiencia va provocando una curva de reducción de la accidentalidad con el paso de los años. El club automovilístico del Reino Unido (The RAC) concluye que con esta medida se podrían ahorrar 4.478 personas accidentadas en Gran Bretaña, 433 de ellas muertas o gravemente heridas.
El sistema de acceso gradual planteado por la entidad catalana constaría de tres fases. Para poder coger el coche a partir de los 17 sería necesario simplemente superar una pequeña verificación de la edad y de condiciones físicas básicas. Entonces se podría conducir acompañado de un adulto en lo que sería una especie de permiso de aprendiz que iría identificado con una placa L roja en la luna trasera y un libro de registro de horas como paso previo a la siguiente fase. Después de una prueba cuyo formato aún no está definido pero que no sería tan compleja como la del permiso de conducir, el joven ya podría conducir sin acompañante durante un periodo de entre seis meses y dos años con las correspondientes limitaciones de horario y de ocupantes de su misma edad, además de ciertas restricciones en la potencia del vehículo y la prohibición absoluta del uso del teléfono móvil en el coche. El carnet de conducir propiamente dicho se obtendría a partir de los 18 años como hasta ahora, pero de esta manera, según el RACC, los jóvenes ya llegarían al momento en el que se enfrentan a la carretera con una experiencia y soltura que puede evitar más de un accidente. El límite de alcoholemia cero durante los dos primeros años de permiso de conducir sería una restricción añadida reclamada por el club automovilístico.
La medida se orienta al colectivo con una tasa de riesgo de sufrir un accidente más alta, prácticamente el 50% superior a la del resto de la población. Junto a ella, el RACC presentó ayer 20 propuestas –las más destacadas se pueden ver en la lista adjunta– con las que se busca reducir un 50% el número de muertos en la carretera en el año 2020 respecto al 2010. El club automovilístico se basa en un sistema que ya funciona en países europeos como Alemania, Austria, Finlandia, Irlanda, Luxemburgo y Suiza. En cada lugar lo hace con diferentes condicionantes, aunque en la mayoría de ellos se exige un examen teórico que aquí de momento no se plantea. “Es una propuesta abierta y flexible que presentamos a las administraciones y que puede adaptarse”, apunta el presidente del RACC, Josep Mateu. La reforma de la ley de tráfico que debe formar los grupos de trabajo en los próximos meses se presenta como el marco perfecto para debatir la medida en la dirección general de Tráfico (DGT).
La medida se inspira en sistemas de países en los que se han conseguido reducir los accidentes entre los noveles