Arabia Saudí exige a Qatar que cierre Al Yazira en diez días
La coalición que rompió relaciones con Doha plantea un ultimátum de 13 puntos
Arabia Saudí exige a Qatar el cierre de la cadena de televisión Al Yazira y cortar los vínculos con Irán y con grupos terroristas como el Estado Islámico como condición para levantarle el embargo diplomático y comercial.
Cerrar la cadena de televisión Al Yazira, cortar los vínculos con Irán y con grupos terroristas como el Estado Islámico (EI), Al Qaeda, el Hizbulah libanés –declarado terrorista por la Liga Árabe–, todos los grupos relacionados con los Hermanos Musulmanes, el Frente Fatah al Sham –nombre adoptado en el 2016 por la facción siria de Al Qaeda–, y poner fin a la presencia militar turca en Qatar son parte de los 13 puntos del ultimátum planteado por la coalición encabezada por Arabia Saudí a Qatar como condición para levantarle el embargo diplomático y comercial.
Hace unas dos semanas los países de la zona, encabezados por Riad, provocaron la mayor crisis diplomática en décadas al romper relaciones e imponer un embargo a Qatar, acusándolo de mantener vínculos con una serie de movimientos islamistas y con el enemigo número uno de los saudíes: Irán.
El documento exige a Qatar alinearse con los países árabes en el campo militar, político y económico. El ministro de Defensa turco, Fikri Isik, manifestó: “Nuestra base es turca pero a la vez preserva la seguridad de Qatar y de la región”.
La coalición formada por Arabia Saudí, Egipto, Emiratos Árabes Unidos y Bahréin, entre otros, acusa a Doha de financiar el terrorismo, cargo que Qatar rechaza. La lista de exigencias fue entregada por Kuwait, que está intentando mediar en la crisis, y señala que Doha tiene diez días para aplicarlas. En el documento no se señala qué pasará a los qataríes si no se cumple lo exigido, y reclama el pago de una suma no especificada de compensaciones por “la pérdida de vidas y otras pérdidas financieras provocadas por las políticas de Qatar”.
Hace pocos días, el secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson, pidió a la coalición encabezada por Riad que presentase a Qatar unas exigencias razonables y prácticas. En lo que concierne a Irán, el documento afirma que Qatar “debe cerrar las legaciones diplomáticas en Irán, expulsar a todo miembro de la guardia revolucionaria iraní y llevar a cabo intercambios comerciales con Irán sólo de acuerdo con las sanciones estadounidenses”.
En Doha se ve el ultimátum como una humillación, ya que Al Yazira es un “gran canal de televisión para un país pequeño”. Uno de sus responsables, Hashem Ahelbarra, dijo: “La lista será rechazada por Qatar y Doha declaró de antemano que estudiaría los ultimátums sólo si se anulan las sanciones y se descarta el cierre de la cadena. Es una cuestión de soberanía nacional; no tiene precedentes en el mundo árabe y creo que va a provocar una escalada aún mayor”.
El ministro de Exteriores qatarí, Mohammed Bin Abdulrahman al Zani, declaró: “Qatar no apoya a ninguna organización terrorista”. Autoridades de Doha declararon ayer a La Vanguardia que el liderazgo del grupo islamista palestino Hamas ya no está afincado en el país; se ha trasladado a Malasia y Turquía. El país, que será anfitrión del Mundial de fútbol en el 2022, afirma también que el embargo es un castigo por mantener una política exterior independiente que simpatiza más con los principios de la primavera árabe. Por ahora Qatar recibe alimentos de Irán y Turquía, y se plantea el envío de 4.000 vacas para mantener el abastecimiento de productos lácteos.
Un directivo de la cadena ve la exigencia como una humillación y prevé que provoque una escalada de tensión