Córdoba TV

Las informaciones sobre Córdoba TV, la televisión que el jeque saudí Aziz al Fawzan montó en el 2012 para propagar el islamismo wahabí en España, no paran de crecer. Lo último es, según El

Confidencial, el uso de una “firma opaca” para dejar la televisión en manos de un hombre de paja y diluir su presencia en el medio, a raíz de las investigaciones policiales sobre su inspiración radical. Dicha firma habría sido creada por un abogado que ha estado vinculado con diferentes procesos de fraude fiscal. De esta manera, el jeque se alejaría supuestamente de una televisión que se vincula a un islamismo que defiende ideas que están penadas judicialmente: homofobia, misoginia, antisemitismo, cristianofobia… Es decir, todas las patas de la intolerancia. Sólo que, en lugar de defender dichos conceptos desde posiciones ideológicas, lo hace desde posiciones religiosas. Sería tanto como considerar que en nombre de Dios se puede ser más intolerante que en nombre de una ideología, cosa que parece que sucede.

Y así es, para desconcierto de quienes consideramos que la democracia no debe amparar estas ideologías del mal como el wahabismo salafista, base

inspiradora de todos los movimientos yihadistas. Sin embargo, ahí está una televisión que se inspira en dicha ideología, que controla a las mujeres que aparecen hasta el punto de prohibir escotes, pantalones o tacones y exigir el velo, lo cual es una vulneración de su libertad, además de implicar una clara discriminación porque no hay normas para los hombres. Respecto de los contenidos, y aparte de contar entre sus colaboradores con algún viejo conocido de las operaciones antiterroristas, Córdoba TV también exige un manual de terminología que prohíbe usar el término yihadista ,o terrorismo

islámico o musulmán extremista o radical islámico, etcétera. Y cuando un yihadista atenta en un país musulmán, no se puede usar el término terrorista. Por supuesto, la palabra Israel no puede ser nombrada y no existen actos terroristas palestinos. Es decir, control de la información no…, lo siguiente.

Para acabar de completar las maravillas, vale la pena escuchar al jeque en sus palabras. En una entrevista al canal Al Majd TV dijo: “¿No odias la fe del politeísta que dice que Dios es la tercera parte de una trinidad, o quien adora a Cristo, hijo de María? El que dice ‘yo no lo odio’ no es musulmán”. En otra, sobre las mujeres: “Se ha demostrado que la naturaleza retorcida de las mujeres se deriva de su propia creación”.

En una tercera: “Si abogan por la fornicación, las relaciones sexuales prohibidas y la homosexualidad, el pueblo los apedreará”. Etcétera… El mismo jeque está poniendo en marcha un proyecto para una agencia de noticias árabe con sede en Madrid. En este punto, la pregunta es simple: ¿reaccionaremos algún día? Porque no tengamos ninguna duda: estas ideologías quieren acabar con nuestras libertades.

Ello es aceptar que en nombre de Dios se puede ser más intolerante que en nombre de una ideología