“Apartamento romántico en el corazón del Eixample”
El proceso de registro de un piso en Airbnb se completa sin hacer ninguna comprobación sobre la propiedad de la vivienda
En apenas unos minutos, el proceso de registro de un piso de alquiler en Airbnb está completado. Es de una facilidad tan pasmosa que preocupa que en ningún momento se tenga que demostrar que el usuario sea realmente el propietario de la vivienda.
La Vanguardia ha sido testigo directo del procedimiento seguido por un experimentador que se hizo pasar por propietario para colocar su presunta vivienda en la oferta de la plataforma de alquiler de alojamientos. Nada más acceder a la página de Airbnb y registrarse como anfitrión incluyendo un simple correo electrónico y un teléfono, se rellena una casilla en la que se indica en qué distrito de la ciudad está el apartamento en cuestión. Es en ese momento cuando una corriente de alegría inunda al nuevo anfitrión: casi 700 euros semanales y ni siquiera se han especificado todavía las características del piso.
A partir de ahí, sólo hace falta introducir los datos: la dirección, tipología de la finca, informar sobre si la vivienda será de uso exclusivo para los huéspedes o compartido, las características del inmueble –si tiene wifi, secador de pelo, lavadora o admite mascotas–, el precio que se desea cobrar por noche y un atractivo texto acompañado de fotografías ilustrativas para poner en valor las virtudes de la oferta. Es todo lo imprescindible para poder publicitar el piso en Airbnb.
No es necesario incluir ni el número de referencia catastral ni incorporar al menos una copia escaneada de la escritura de la vivienda para demostrar que la propiedad que se va a anunciar es del anfitrión. Únicamente al final del proceso de validación y como último dato, pero no obligatorio, se plantea la posibilidad de incluir el número de registro de la vivienda de uso turístico, un permiso que sólo puede solicitar el propietario y que determina la legalidad del apartamento. La plataforma de intermediación más utilizada advierte que “es importante
La casilla destinada al número del registro de vivienda turística se puede omitir sin que el anuncio sea rechazado