Màrius Rossell
Trilogi, de Igualada y con oficinas en Asia, crea una función para socializar las compras
FUNDADOR DE TRILOGI
Trilogi, especializada en desarrollar tiendas de comercio electrónico, tiene su fábrica de software en Igualada y oficinas comerciales en Barcelona, Shanghai y Hong Kong. Ahora prepara su expansión a Europa.
En el momento de comprar en una tienda online, cada consumidor puede convertirse en un influencer: si comparte su compra en las redes sociales, viraliza el producto y aporta tráfico a la web de la marca, a cambio puede recibir puntos, descuentos o dinero de la marca en cuestión. “Esta funcionalidad, Social Pay, añadida a la plataforma de cualquier tienda online, va a ser nuestro producto estrella. Es una idea muy simple, pero nadie la ha desarrollado antes: seguro que nos lo copiarán, pero ahora somos los primeros” asegura Màrius Rossell, fundador y director general de Trilogi, compañía de soluciones de comercio electrónico creada en 1999 en Igualada.
Desde el 2010 la compañía apostó por crecer en Asia, donde ahora tiene oficinas en Shanghai y Hong Kong, con ocho personas. Pero la fábrica de software está en Igualada, con una plantilla de unas 70 personas; además la compañía tiene oficina comercial en Barcelona.
Social Pay, enfocado principalmente a grandes marcas, saldrá al mercado a finales de agosto, como una funcionalidad más de su plataforma software as a
service LogiComerce. “Se me ocurrió en Asia, porque allí las redes sociales se utilizan mucho más que en Europa”, explica Rossell. China es también el primer país del mundo en compras online, con unos 150 millones de consumidores online. En el 2017 la compañía espera facturar 4,1 millones de euros, frente a los 3,4 millones del 2016 (un 20% más). El 90% del negocio se realiza en España –con clientes como Mediamarkt, Lacoste...– y el 10% en Asia, que “es una apuesta a largo plazo”, reconoce Rossell. “El objetivo es que pronto el negocio internacional sea más grande que el que hacemos en España”. Trilogi prepara ahora su apuesta por Europa; está en fase de definición de los mercados, y “estamos paquetizando el producto, para poder tener distribuidores y socios locales”.
Desde Shanghai y Hong Kong trabajan principalmente para empresas internacionales que quieren vender online en Asia. “Muchas empresas occidentales tienen el comercio electrónico sobre grandes plataformas, pero son muy caras y no les sale a cuenta realizar tal inversión para estos nuevos mercados asiáticos (Vietnam, Indonesia, Malasia...) que requieren una casuística de muchos idiomas, divisas, sistemas de pago...”.
Entre sus clientes tiene empresas americanas, europeas y asiáticas, “de todos los sectores”. La competencia de Trilogi son las plataformas SAP Hybris, Demandware (Salesforce), IBM Websphere o la de código abierto Magento.
“Nuestra plataforma es personalizada al 100%, no utilizamos plantillas. Y tenemos funcionalidades avanzadas, por ejemplo, para que una tienda online de una gran marca asigne cada compra al distribuidor que le corresponda –la facturación, el envío–, sin que el usuario final llegue a percibirlo”.
La empresa de servicios de comercio electrónico factura 4,2 millones y prevé crecer en Europa