El secreto está en el Teide
Los aspirantes al Tour estudian los puertos y buscan oxigenarse en altura
Las redes sociales, especialmente Instagram, permiten seguir en primera fila los preparativos de los corredores ante el cada vez más cercano Tour de Francia (se inicia el sábado). Los entrenamientos en los puertos de montaña más determinantes del recorrido están a la orden del día, pero también las estancias prolongadas en zonas de altitud, donde el organismo aumenta las reservas de glóbulos rojos en la sangre. Entre los aspirantes a la zona noble del próximo Tour son minoría los que, como el francés Romain Bardet, apuestan por el uso de cámaras hipóxicas (donde se simulan las condiciones de altitud), práctica más extendida en otros deportes que no permiten este tipo de concentraciones prolongadas en altitud.
Entre los destinos de moda para preparar el Tour el rey es el Teide. En un momento u otro de la temporada los grandes del Tour pasan por el volcán tinerfeño y no es rara la coincidencia de bloques de distintos equipos cruzándose por las carreteras del Teide. Uno de los defensores de los efectos positivos de la oxigenación es Alberto Contador, quien hace apenas 48 horas aún colgaba fotos suyas en la zona.
Los ciclistas suelen instalarse en el parador de Las Cañadas, situado a 2.300 metros de altitud, pero en ocasiones, debido a la alta afluencia, buscan acomodo en casas particulares que aceptan huéspedes. Chris Froome, Richie Porte, Jakob Fuglsang, Michal Kwiatkowsi y muchos otros han visitado el Teide en las últimas semanas, como lo hizo en el pasado Bradley Wiggins en su camino hacia la victoria del Tour 2012.
“El mejor sistema es acudir varias veces al año y luego regresar poco antes de la competición, para que los efectos fisiológicos perseguidos se alarguen más días”, explicaba recientemente Julien Pinot, entrenador de su hermano Thibaut, otro cliente habitual del Teide.
Chris Froome es también un adepto de la preparación tinerfeña y en las las fechas previas al Tour 2014 incluso lanzó una denuncia: “Coincidimos tres favoritos del Tour en el Teide y ni un solo día nos hicieron análisis fuera de competición. Muy decepcionante”. El presupuesto de la batalla contra el dopaje no alcanza para zonas tan exóticas.
Sierra Nevada o Livigno (en los Alpes italianos) son otros puntos especialmente concurridos para la preparación en altura, aunque no hay que descartar que muchos ciclistas se muevan por efecto mimético. Lance Armstrong popularizó las concentraciones para escalar puertos decisivos. Ahora la moda está en el Teide.
CUARTEL VOLCÁNICO El parador de Las Cañadas, a 2.300 metros, suele ser el punto de concentración de los ciclistas
ANÁLISIS DE LAS DIFICULTADES Peyragudes, Izoard y Galibier también han atraído a los favoritos en las últimas semanas