Las administraciones no perdonan las tasas del agua
Las familias vulnerables se ven obligadas a pagar todos los impuestos de la factura aunque sean beneficiarias del fondo de solidaridad
Algo más de la mitad de la factura del agua corresponde aproximadamente al suministro energético. La otra mitad son impuestos y tasas. En los municipios con el servicio prestado por Aigües de Barcelona, las familias en riesgo de vulnerabilidad atendidas por los servicios sociales pueden solicitar que la compañía les subvencione el consumo a través del fondo de solidaridad durante unos meses. En cambio, de pagar el resto de conceptos nadie se escapa.
Con números se entiende mejor la situación. Una factura real de 14 metros cúbicos de agua supone como coste total a pagar 40,46 euros. El agua propiamente dicha son 23,45 euros (sumando la cuota del servicio y el consumo). Esa parte es subvencionada en los casos que consideran más necesarios los servicios sociales municipales. El resto de cargos, que alcanzan los 17,01 euros en este ejemplo, no quedan absueltos y se cargan a las raquíticas cuentas corrientes de los más vulnerables.
Sea cual sea la situación familiar, a través de la factura todos los clientes se ven obligados a pagar la repercusión sobre los ciudadanos del canon del agua de la Generalitat de Catalunya, la tasa de alcantarillado de los ayuntamientos, la tasa metropolitana de tratamiento de residuos municipales del Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) y el IVA. Las administraciones aseguran que están obligadas a repercutir sobre el ciudadano las correspondientes tasas, aunque defienden que también aplican bonificaciones para reducir su impacto en los hogares que tienen las economías más maltrechas.
Ante esta situación se encontraron 17.573 familias del área metroconsumido. politana durante el año 2016, de las cuales 6.186 eran de Barcelona ciudad. El fondo de solidaridad de Aigües de Barcelona asumió el consumo de 71.634 facturas. En lo que va de año se han tramitado 38.171 facturas. De todas ellas se han ahorrado la parte del consumo pero han tenido que pagar los impuestos.
Los servicios sociales de las ciudades metropolitanas son los encargados de solicitar a Aigües de Barcelona que incluya las familias con las que ellos trabajan en el fondo de solidaridad. En cambio, las ayudas que se aplican sobre el canon del agua de la Generalitat y la tasa metropolitana de residuos debe ser el propio interesado el que las solicite, algo que en muchos casos no se acaba materializando por las dificultades de los trámites para los potenciales beneficiarios.
El canon del agua, responsabilidad de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA), es un impuesto sobre el consumo que se calcula por tramos, dependiendo del volumen La bonificación social dirigida a unidades familiares con todos los miembros en el paro, personas que cobran la renta mínima de inserción y otros casos de vulnerabilidad reduce el coste del canon al 50%, de 0,49 euros por metro cúbico a 0,24. Fuentes del ACA cifran en 11.324 las solicitudes vigentes del canon en el área metropolitana, la mitad de ellos son pensionistas jubilados y personas viudas. Además, hay una bonificación para hogares con familias numerosas o discapacitados que amplia los tramos del canon para que tengan más cantidad de litros de agua al precio básico. Ambas ayudas deben ser solicitadas a la ACA, aunque desde hace unos meses, para dar cumplimiento a una ley aprobada recientemente, lo están empezando a tramitar directamente las entidades suministradoras.
En cuanto a la tasa de alcantarillado es variable en cada municipio. En el caso de Barcelona, fuentes municipales aseguran que se está estudiando desde hace meses la posibilidad de reformarla para blindar los casos vulnerables, pero a día de hoy aún no se ha tomado ninguna decisión al respecto. El Ayuntamiento deriva a los recién estrenados Puntos de Asesoramiento Energético todos aquellos casos de pobreza energética para que conozcan sus derechos y puedan acogerse a las diferentes ayudas que, en ningún caso, reducen el coste de la factura a cero euros.
LA MITAD DE LO QUE SE PAGA Cerca de la mitad del recibo corresponde a tributos como el tratamiento de residuos
DIVERSOS IMPLICADOS La factura mantiene el canon de la Generalitat y los cargos municipales y metropolitanos