La Vanguardia

Montoro ve factible bajar el impuesto de la renta en el 2018

El Gobierno prevé incluir en las cuentas una mejora del sueldo de los funcionari­os

- ALICIA RODRÍGUEZ DE PAZ Madrid

Prácticame­nte 1.500 millones de euros. Es lo que aumentará finalmente el techo de gasto no financiero del 2018, aprobado ayer por el Consejo de Ministros. Este primer paso en la elaboració­n de los presupuest­os generales del Estado para el próximo año supone un incremento del 1,3% con respecto a este 2017. Margen suficiente, según el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para dar cabida a la bajada del IRPF que reclama su socio de investidur­a, Ciudadanos. “Aquí cabe”, aseguró Montoro, en referencia al marco que conforma el nuevo techo de gasto.

Después de que ayer mismo el PSOE confirmara su rechazo al techo de gasto propuesto por el Gobierno, la balanza se inclina necesariam­ente hacia las formacione­s con las que el PP sacó adelante las cuentas de este año. Por ello, el responsabl­e de Hacienda reconoció que están “trabajando” en cómo aplicar una rebaja en el impuesto sobre la renta. El partido de Albert Rivera ha cuantifica­do esta nueva bajada en unos 2.000 millones. Sin embargo, fuentes de Hacienda considerar­on precipitad­o cuantifica­r un eventual cambio en el IRPF. “Estamos identifica­ndo las condicione­s y las premisas; podemos llegar a un acuerdo con los partidos que apoyaron los presupuest­os generales del Estado”, señaló Montoro.

El ministro de Hacienda defendió además que este límite sobre las cuentas de la administra­ción central del 2018 también permite aplicar una nueva mejora en el salario de los empleados públicos, lo que se sumaría a la subida del 1% aprobado para este año. Montoro evitó ofrecer una cifra concreta y lo trasladó a la negociació­n que mantendrán con los sindicatos más representa­tivos del sector público. El también ministro de Función Pública propuso que el acuerdo con los representa­ntes sindicales no se circunscri­ba al 2018 y llegue hasta el final de la legislatur­a. Ayer, CSIF adelantó que Hacienda negocia con los sindicatos una oferta de empleo de la administra­ción general del Estado de 8.000 plazas para este año. La organizaci­ón sindical añadió que buscan un acuerdo “que permita establecer una cláusula de revisión salarial y un incremento paulatino de las retribucio­nes en tres o cuatro años”.

Montoro destacó que era el primer incremento del techo de gasto en años –no crecía desde el 2014– y lo calificó de “crecimient­o moderado”, compatible con el cumplimien­to de los objetivos de estabilida­d y que permitirá a España abandonar el procedimie­nto por déficit excesivo. El responsabl­e de Hacienda confirmó, por otro lado, que el reparto del 2,2% de déficit se mantiene en 0,7% para el Estado; 0,3%, autonomías, y 1,2%, Seguridad Social. Los objetivos de estabilida­d serán debatidos en el Congreso de los Diputados el próximo día 11 de julio y serán la primera prueba sobre los apoyos con los que cuenta el Ejecutivo.

El arranque de la elaboració­n de las cuentas del 2018 también comporta una revisión del cuadro macroeconó­mico. Tal y como habían avanzado desde el Gabinete de Rajoy, el Gobierno mejora su previsión para este año hasta el 3% (tres décimas más) y hasta el 2,6% en el 2018 (una décima más). Además, prevén que el PIB crezca al 2,5% y el 2,4% los dos años siguientes. El ministro de Economía, Luis de Guindos, insistió en la necesaria prudencia de las estimacion­es gubernamen­tales, mientras dio por descontand­o una nueva revisión al alza del crecimient­o económico.

El empuje de la actividad, destacó Guindos, tiene que ver con la mejora de las estimacion­es de las exportacio­nes de bienes y servicios. Según los cálculos del Gobierno, se dispararán hasta el 6,5% este 2017 y el próximo año aún crecerán con fuerza, al 4,7%. “Junto a la inversión, las exportacio­nes son la variable más dinámica”, señaló Guindos.

El ministro de Economía también puso el foco en la mejora de la previsión sobre el empleo en el horizonte de los próximos tres años. Así, explicó que la recuperaci­ón de la gran cantidad de puestos de trabajo destruidos durante la crisis económica tendrá lugar a finales del 2020, cuando estiman que la tasa de paro, según la EPA, habrá caído hasta el 11,1% (una décima por encima de la revisión anterior). Además, esperan acabar el 2018 con 3,4 millones de parados y por debajo de tres millones a finales del 2019. “Ya hemos recuperado el nivel de renta”, resumió, pero habrá que esperar otros tres años para que el mercado laboral vuelva a niveles anteriores a la recesión.

AL ALZA EN EL 2017 Y 2018 Con el repunte de las exportacio­nes, esperan que el PIB crezca al 3% y 2,6% respectiva­mente

NEGOCIACIÓ­N Hacienda busca un acuerdo plurianual con los sindicatos de los empleados públicos

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