APLICACIONES REALES
ENFERMEDADES. Se han realizado pruebas con resultados esperanzadores en enfermos de Parkinson y también de epilepsia. Aunque algunos expertos sostienen que se podría utilizar también para el tratamiento de la esquizofrenia, no se sabe aún el momento ni la parte del cerebro que se debería de estimular, ni a qué frecuencia y con qué magnitud.
DIAGNÓSTICO. La inteligencia artificial podría ayudar a realizar el diagnóstico a los médicos y hacerlo con mayor celeridad a partir del análisis del historial clínico acumulado de millones de pacientes. “La inteligencia artificial tiene en cuenta centenares de dimensiones, el cerebro humano sólo tres dimensiones. Esto marca una diferencia gigantesca”, razona Kevin Warwick.
COMUNICACIÓN. Uno de los grandes campos de trabajo es lograr que máquinas y robots aprendan a comunicarse con las personas en escenarios imprevisibles y cambiantes, como una conversación real.
MILITAR. La industria armamentística ya está utilizando vehículos de combate autónomos en conflictos reales para reducir las bajas humanas.
COCHES AUTÓNOMOS. La conducción sin piloto al volante se está desarrollando a pases agigantados aunque con muchas limitaciones y algunos accidentes.
CREATIVIDAD. Se ha conseguido que computadoras interpreten una partitura como lo haría un humano y que pinten un cuadro sobre un lienzo siguiendo el estilo de autores ilustres.