Caixa d’Arquitectes se transforma en banco
La cooperativa de crédito Caixa d’Arquitectes (denominada Arquia Banca) ha iniciado los trámites para dejar de ser una cooperativa y transformarse en banco. La operación implicará que sus alrededor de 30.000 socios se convertirán en accionistas. A diferencia de otras cooperativas, en el caso de Arquia –fundada en 1983– sólo una cuarta parte de los 119.000 clientes son a la vez socios. La entidad que preside Javier Navarro considera que el mejor sistema para poder avanzar en el crecimiento de la entidad es ser un banco. Arquia quiere extender su negocio a Portugal, donde prevé abrir dos sucursales. El año pasado, la entidad obtuvo un beneficio neto de 8,7 millones de euros, un 19% más. La entidad logró un volumen de negocio de 2.120 millones mientras que los depósitos y recursos intermediados fueron de 1.681 millones. La previsión para el año próximo es que el resultado neto alcance los 12 millones. Aunque la entidad nació para dar servicio a los arquitectos, ha diversificado su actividad hacia profesionales de otros sectores. Actualmente sólo el 60% de los clientes son arquitectos. El objetivo de la todavía cooperativa es mantenerse en el segmento de banca al detalle para profesionales. La decisión de Arquia contrasta con la de Caixa d’Enginyers, otra entidad financiera en expansión, que también es una cooperativa de crédito y piensa seguir siéndolo.