Interior convoca 500 nuevas plazas para los Mossos
La conselleria sortea el requerimiento de Hacienda de 50 agentes
El conseller de Interior, Jordi Jané, firmó ayer la convocatoria para la promoción de 500 nuevas plazas para los Mossos d’Esquadra, en medio del pulso con el Gobierno central, que ha limitado cualquier incremento a los criterios de reposición (lo que supondría una cifra de 50 nuevos efectivos). El lunes se reúne la Junta de Seguridad de Catalunya, un encuentro al que se ha venido resistiendo el Gobierno central y que deberá abordar esta cuestión. Ayer, Jané alegó que la firma de la convocatoria “no la puede discutir nadie”, porque la Generalitat ha atendido el requerimiento del Ministerio de Hacienda para limitar a 50 las plazas de reposición, pero ha añadido 450 más una vez aprobados los Presupuestos Generales del Estado de 2017 y que, según Interior, permiten un criterio de reposición más flexible.
El conseller subrayó que esta convocatoria es imprescindible para la seguridad de Catalunya, ya que da respuesta “a una exigencia de la sociedad catalana, que necesita nuevas promociones de mossos”. La convocatoria de esta promoción de mossos, la primera desde el año 2011, saldrá publicada hoy en el Diario Oficial de la Generalitat, lo que permitirá a los aspirantes empezar a inscribirse de forma telemática a partir del sábado, según el conseller. Jané destacó que, como había prometido su conselleria en el Parlament, ha firmado antes del verano la convocatoria para esta promoción de 500 nuevos mossos, que será la número 26 y la primera desde el año 2011, cuando se licenciaron 600 policías.
El conseller insistió en la importancia de que se incremente la plantilla de la policía catalana, que actualmente tiene unos 16.800 agentes, frente a los 18.267 que se estipuló en la Junta de Seguridad del 2006 como la plantilla óptima de los Mossos d’Esquadra. Jané lamentó que, desde la última promoción, en el 2011, el contingente de los Mossos d’Esquadra, que llegó a superar con creces los 17.000 efectivos, no sólo no ha aumentado, sino que se ha reducido en unos 400 efectivos –al no reponerse todas las bajas–, pese a que las “exigencias” en materia de seguridad “son más altas”, por el aumento de la amenaza yihadista y el incremento del turismo, entre otros aspectos.
“Los alcaldes, los municipios, la sociedad, nos piden más agentes –señaló Jané–. Ante esta reclamación, no podíamos dejar de convocar, de cumplir el objetivo de las 500 plazas, porque la pérdida de efectivos no es admisible”. El conseller se mostró convencido de que la convocatoria va a contar con miles de aspirantes y garantizó que, finalmente, quienes superen las pruebas serán “los mejor preparados”. “Es un reto seleccionar a los mejores, los que puedan dar un mejor servicio a la ciudadanía”, apuntó Jané sobre una convocatoria que, como principal novedad, elimina el límite de 35 años de edad y permite lucir tatuajes en lugares visibles, aunque con condiciones.
Ahora, los aspirantes podrán tener entre 18 y 65 años, pero se les exigirá no sólo la ESO sino también el bachillerato, la FP 2 o un título equivalente. En cuanto a los tatuajes visibles más allá del uniforme, no se admitirá a aspirantes con tatuajes de más de 15 centímetros en el cuello y de más de 70 centímetros en el brazo, ni aquellos que contengan mensajes con valores que no se consideren pertinentes, en función de lo establecido por el Código Ético de la Policía. En este sentido, Jané remarcó que a los aspirantes se les exigirán los valores intrínsecos al cuerpo de los Mossos para que sus actuaciones sean “impecables”.
Esta convocatoria será la primera desde el 2011, cuando se licenciaron 600 policías y ahora hay menos de 17.000