El cine que surgió de la televisión
‘Downton Abbey’ se convertirá en película, un camino que ya han recorrido diversas series con suerte dispar
La familia Crawley y su servicio volverán a llenar de vida Downton
Abbey, aunque en esta ocasión será para grabar una película y no una serie de televisión. Tras meses de rumores, Michael Edelstein, presidente de la división internacional de NBCUniversal, confirmó a finales de junio que la película lleva ya un tiempo en marcha y que se está acabando de pulir el guion. Edelstein también adelantó cuál va a ser la gran dificultad de la misión: reunir a los veinte actores y actrices principales del reparto, involucrados en otros proyectos, con vistas a iniciar el rodaje en el 2018.
El creador de la aclamada serie británica, Julian Fellowes, se ha mostrado entusiasmado con retomar en la pantalla grande esta ficción de la cadena ITV que se despidió en diciembre del 2015, con un especial navideño tras seis temporadas en antena y más de 50 episodios emitidos. Con el rodaje de la película, Downton Abbey se añade a una larga lista de series de televisión que han tenido una segunda vida en la pantalla grande, aunque pocas lo hacen con el misdo mo elenco de la serie original, ya que en la mayoría de ocasiones el objetivo es sólo recuperar la marca muchos años después del final de la serie, cuando el factor nostalgia ya ha hecho acto de presencia.
Como apenas habrán pasado tres años desde el adiós de la serie, no va a ser este el caso del paso a pantalla grande de Downton Abbey. Tampoco lo fue Sexo en Nueva York, donde Sarah Jessica Parker, Kim Cattrall, Cynthia Nixon y El principal objetivo suele ser recuperar una marca popular para convertirla en un éxito de taquilla veraniego Kristin Davis retomaron sus papeles apenas cuatro años después del cierre de la popular serie de HBO. En el 2008 se estrenó una primera película con gran aceptación entre sus seguidores, no así la segunda, grabada dos años más tarde, que seguramente ha puesto punto y final a la aventura cinematográfica de Carrie Bradshaw y sus amigas.
También con el mismo reparto se teletransportó de la televisión al cine la mítica serie de ciencia ficción Star Trek. Cuando concluyó su periplo en televisión en 1969, tras tres temporadas y cerca de 70 episodios, la serie ya se había convertido en una producción de culto y una década más tarde se estrenaría una primera película que mantenía el elenco original de la serie, capitaneado por William Shatner (capitán James Kirk) y Leonard Nimoy (Spock), que aún rodarían cinco secuelas más, hasta 1991. Después serían relevados por los protagonistas de la franquicia televisiva Star Trek: the
next generation, con Patrick Stewart (capitán Jean-Luc Picard) que grabarían cuatro filmes. Desde 2009 se han rodado tres películas más con un reparto sin conexiones televisivas.
Más fácil para mantener el mismo reparto lo ha tenido Los Simpson, que vivieron una versión cinematográfica en el 2007 sin necesidad de que la serie animada hubiera concluido (de hecho aún sigue en antena hoy día). Pero lo más habitual es que los protagonistas de una adaptación cinematográfica no tengan nada que ver con los de la serie televisiva debi- a que normalmente han transcurrido varios lustros y el objetivo principal es recuperar la marca para conseguir una superproducción de verano que arrase en taquilla. Ahí está la reciente versión de ese éxito de los noventa,
Los vigilantes de la playa, que, pe- se a contar con la presencia de dos de las estrellas originales de la serie, Pamela Anderson y David Hasselhoff, no ha logrado convencer ni a crítica ni a público. Como tampoco triunfaron en los años 2000 y 2003 las películas basadas en Los Ángeles de Charlie
(1976-1981) en las que Drew Barrymore, Cameron Diaz y Lucy Liu no lograron hacer olvidar al primer elenco televisivo formado por Farrah Fawcett-Majors, Kate Jackson y Jaclyn Smith. En esa línea de acción también se probó fortuna a finales de los noventa con otro clásico de la televisión británica, El santo, que en el original interpretaba Roger Moore y en la pantalla grande Val Kilmer, que no consiguió estar a la altura del homónimo televisivo y se quedó en una sola entrega.
Tampoco Liam Neeson hizo ol- vidar a George Peppard como John “Hannibal” Smith en la aventura cinematográfica de El
equipo A (2010), cuya mejor crítica recibida fue que capturaba la misma superficialidad de la serie original. Corrupción en Miami (2006) también intentó reverdecer los laureles de la icónica serie marcada por la estética ochentera protagonizada por Don Johnson y Philip Michael Thomas. Pese a estar dirigida por el mismo director que la serie, Michael Mann, no supo conservar el espíritu de la serie La popularidad de ‘Star Trek’ y ‘Misión imposible’ ha dado lugar a una rentable saga cinematográfica pese a la presencia de Colin Farrell y Jamie Foxx.
Pero no todo han sido relativos fracasos. Cuando el director Brian de Palma y el actor Tom Cruise iniciaron la saga de Misión imposible, habían transcurrido más de dos décadas del final de la serie de la CBS, que estuvo siete años en antena entre 1966 y 1973. Aparte de recuperar la pegadiza sintonía original (versionada por Adam Clayton & Larry Mullen, de U2), pocas conexiones había entre la serie y película excepto la inverosimilitud de las acciones llevadas a cabo. La película fue todo un éxito y el próximo año se estrenará una sexta entrega. También hizo fortuna en esa segunda vida en el cine La familia Addams, un éxito de los años sesenta, que regresó a principios de los noventa con dos cintas que supusieron el primer papel importante de una entonces jovencita y desconocida Christina Ricci.