Anestis Azas
‘Clean city’ lleva la voz de cinco emigrantes al Lliure
DIRECTOR DE TEATRO
El teatro documental toma el escenario del Lliure con Clean city, un montaje dirigido por Anestis Azas y Prodromos Tsinikoris en el que cinco mujeres de la limpieza de Grecia, todas emigrantes, llevan sus vivencias a escena.
El grupo neonazi griego Aurora Dorada aseguraba que iba a limpiar las calles de Grecia. Violencia contra los inmigrantes incluida. Y los directores de teatro Anestis Azas y Prodromos Tsinikoris se propusieron mostrar en el escenario quién limpia de verdad las calles y las casas de su país. Incluso en los países menos ricos siempre hay alguien más precario, y una mayoría de esos limpiadores y limpiadoras son, o por lo menos eran, porque la situación está cambiando, emigrantes. Y con cinco mujeres de la limpieza provenientes de países como Bulgaria, Filipinas, Albania o Moldavia, Azas y Tsinikoris han creado Clean city ,un espectáculo de teatro documental que hoy y mañana se podrá ver en el Teatre Lliure dentro de la programación del festival Grec.
Un montaje lleno de denuncia y humor, canciones y baile en el que sus cinco protagonistas cuentan su experiencia limpiando Atenas y la dureza de la vida en un país en el que, dice Azas, ha habido “un racismo institucional, diferente al de la calle”: hasta hace apenas seis meses, recuerda, imperaba el derecho de sangre y los hijos de emigrantes no eran griegos. “El cambio se ha aprobado ahora que los emigrantes se van”, señala. Y en la calle, recuerda, han tenido lugar ataques como el que sufrió Konstantina Kouneva, una limpiadora de origen búlgaro a la que le lanzaron en el 2008 ácido en la cara por luchar por los derechos de su colectivo. Hoy es diputada en el Parlamento Europeo por Syriza, el partido de izquierdas gobernante en el país.
Entre las cinco protagonistas que suben al escenario del Lliure de Montjuïc hay una profesora, Drita Shehi, que llegó en los noventa a Grecia desde Albania, de donde procede la comunidad limpiadora más numerosa. También desde los ochenta llegaron a Atenas muchas mujeres filipinas a trabajar y una de ellas interviene en Clean city, Fredalyn Resurreccion. Y asimismo lo hace una limpiadora y soprano, la moldava Valentina Ursache. Mujeres que, apunta Azas –que desde el 2015 es el director junto a Tsinikoris de la escena experimental del Teatro Nacional de Atenas–, explican las dificultades “de ser emigrante sin tener tus derechos, los problemas para ir a los servicios sociales, la dificultad con la policía, cómo es criar niños en el país sin tener papeles o cómo conseguir la electricidad para el piso presentando el permiso de residencia de una amiga”.
Mujeres que hablan de acoso sexual pero también de cómo la emigración ayudó a la emancipación de las griegas. Con mucho humor, Fredalyn explica incluso cómo aprendió griego con una canción de Notis Sfakianakis, que ha defendido en público a Aurora Dorada y que parece, deja caer ella, mucho más árabe que griego. Un retrato crítico muy humano, concluye Azas, que de todas maneras representa en realidad “una historia de éxito” porque muestra a cinco mujeres “que son muy fuertes, que luchan contra lo que sucede y que dicen lo que piensan”.
Los neonazis Aurora Dorada querían limpiar Grecia; esta obra muestra quién la limpia realmente