Londres: “Es hora de ponernos a trabajar”
La primera reunión de la segunda ronda de negociaciones del Brexit dejó ayer una imagen que invitaba a todo tipo de interpretaciones maliciosas. A un lado, la delegación europea, con el francés Michel Barnier al frente, cargada de carpetas y documentos con las posiciones de los Veintisiete sobre el divorcio británico. Del otro, los representantes británicos, liderados por el ministro del Brexit, David Davis, con las manos vacías, sin un papel a la vista. ¿Sin notas o sin ideas? La fotografía hizo las delicias de los comentaristas políticos británicos, que vieron en ella el reflejo de la imposibilidad del Gobierno británico de acordar una postura sobre el Brexit. Davis intentó contrarrestar verbalmente esa percepción. “Es hora de ponernos a trabajar para conseguir que esta negociación sea un éxito”, dijo a su llegada a Bruselas. El ministro británico citó explícitamente el “arreglo financiero” entre los cuatro grandes temas que Londres y la UE deben resolver en la primera fase de los contactos, aunque su colega Boris Johnson haya sugerido que Bruselas puede esperar sentada si pretende que paguen una suma astronómica (la cifra no está fijada, pero serán decenas de miles de millones de euros). “Es hora de ir al fondo de la cuestión y empezar a examinar y comparar nuestras respectivas posiciones para poder avanzar”, le alentó Barnier. Londres, sin embargo, no ha publicado ningún informe con su posición sobre el capítulo financiero, como sí ha hecho con los otros temas. Que Davis se retornara ayer a Londres dejando en Bruselas a sus subalternos no contribuyó a tranquilizar a los europeos sobre su capacidad de negociar, aunque regresará el jueves para hacer balance.