El Dream Team entra en escena
Superadas las emociones de la inauguración, que recibió elogios mundiales, la actividad deportiva empezó a un ritmo imparable. En Badalona, todos los ojos estaban pendientes del debut del Dream Team estadounidense, que arrasó como no podía ser de otra manera a Angola por 116-48 en un partido que tuvo en un instante un curioso capicúa en el marcador (82-28). Días después, la selección africana protagonizó una de las sorpresas, aún recordada, al vencer a España. “Para mí, estos Juegos son los más importantes de mi vida. Desfilar con el resto de los atletas ha sido increíble. Todos los que participaban en la ceremonia querían hacerse fotos conmigo”, explicó después del encuentro Magic Johnson, el fenomenal base de Los Ángeles Lakers, quien explicó que “la gente me ha aplaudido mucho porque no pensaban que estuviera aquí”.
En natación, la húngara Krisztina Egerszegi, como hace en la actualidad su compatriota Katinka Hosszú, empezó a marcar territorio con el oro en los 400 estilos, mientras que Martín López Zubero, la gran esperanza española, pedía “calma y tranquilidad” antes de su debut en los 100 mariposa a la espera de disputar la prueba en la que tenía depositadas todas las esperanzas, los 200 espalda. También había mucha expectación en el campo de regatas de la vela, un día antes del inicio de la competición. La presencia del príncipe Felipe era un aliciente más y Jesús Turró, jefe de la delegación española, reiteraba que “seguimos aspirando a diez podios y, a priori, no damos ninguna medalla por perdida”.
En la segunda jornada llegó la primera medalla, un bronce, de una deportista serbia: Aranka Binder en carabina de aire.