JxSí y la CUP retrasan unos días la ley del Referéndum ante la presión judicial
Forcadell evita incluir la norma pese al adelanto del inicio de curso El TC mantiene la suspensión del reglamento exprés de la Cámara
Pese al precipitado retorno de los diputados de la Mesa del Parlament a la actividad política, ayer no se incluyó la ley del Referéndum en el orden del día, por lo que habrá que esperar hasta el día 22. Carme Forcadell lo justificó por la necesidad de sortear “la presión judicial”, que, según el Gobierno central, se producirá igual en cuanto se dé luz verde al debate de la ley.
El primer episodio del choque frontal entre el Gobierno y la Generalitat deberá esperar al menos unos cuantos días más de agosto, después de que la Mesa del Parlament decidiera ayer aparcar sine die la tramitación de la ley del Referéndum a pesar de que fue registrada por la vía de urgencia por JxSí y la CUP a finales de julio.
Un proyecto legislativo vital para la suerte del 1-0 que, si bien no se había añadido en el orden del día, la presidenta Carme Forcadell tenía la potestad de incluirlo en el debate hasta el último momento. La próxima reunión de la Mesa está fijada para el 22 de agosto.
El alto en el camino hacia la consulta unilateral del primero de octubre fue defendido por Forcadell, en una tensa reunión de la Mesa, por la “complejidad” de la medida y la necesidad de sortear la “presión judicial”. Un movimiento táctico del órgano rector de la Cámara que logra, aunque sea temporalmente, salvaguardad el proyecto de ley de la suspensión del Tribunal Constitucional.
“No somos inocentes, estamos en un contexto de judicialización y la ley es compleja. Estamos valorando qué hacemos”, afirmó Forcadell sin convencer a los partidos de la oposición. Ciutadans, PSC y PP acusaron a la presidenta de estar utilizando la institución y el reglamento al servicio de los intereses de Junts pel Sí y la CUP.
La primera reunión de la Mesa en este periodo de sesiones fue bronca y desagradable (“se ha liado parda”), según el relato de varios de los presentes, avanzando la tensión en el que se puede instalar la política catalana en los próximos meses.
El hecho de que Forcadell no aclara las razones de la exclusión de la ley del Referéndum provocó la inmediata petición de palabra del diputado del PSC, David Pérez, que señaló la “irregularidad” de un procedimiento que, a su juicio, coarta las funciones de la oposición. “¿Es que quieres aprobar ya la ley del referéndum?”, le replicó Forcadell con ironía, según varias fuentes presenciales.
La discusión subió de tono. Tomó la palabra José María Espejo (Cs) –“la Mesa no puede actuar por motivos estratégicos de partido”– y María José Cuevas (PPC), mientras que Anna Simó (ERC) fue la que cerró filas con Forcadell de una manera más clara y tajante.
Posteriormente, ya ante la prensa, la oposición cargó duramente contra la presidenta de la Cámara. “Forcadell actúa como presidenta de la ANC y no de la Cámara”, censuró Fernando de Páramo, portavoz de Cs. Miquel Iceta, líder del PSC, habló de “burla” a las instituciones, mientras que el líder del PPC, Xavier García Albiol, lo calificó de “episodio esperpéntico”.
El freno momentáneo a los planes independentistas, cuando se encara la recta del 1-O, contrasta con la celeridad que aplicaron los JxSí y la CUP para aprobar a finales de julio la reforma del reglamento del Parlament, que entre otras medidas situaba el inicio de sesiones tras el parón estival el 16 de agosto –trastocando el calendario político catalán–, y un proyecto de ley del Referéndum que en su redactado cuando fue registrada el 31 de julio reclamaron “su tramitación por el procedimiento de urgencia extraordinaria”.
El funcionamiento normal de la Cámara, y lo que esperaban los grupos de la oposición, es que en la sesión de ayer se debatiera y admitiera
La oposición acusa a Forcadell de poner la Mesa y el reglamento al servicio de Junts pel Sí La ley fue registrada a finales de julio por JxSí y la CUP con carácter de urgencia extraordinaria
a trámite la ley del Referéndum con los votos del bloque independentista. “No lo he considerado oportuno”, dijo Carme Forcadell en la rueda de prensa posterior a la Mesa, alimentando el secretismo con el que está actuando el Govern y Junts pel Sí, bajo el pretexto de defenderse de la “presión judicial”.
Este fue, precisamente, uno de los argumentos a los que se agarraron Forcadell y los otros tres miembros de JxSí que están en la Mesa para no firmar el 31 de julio con el resto de diputados de la coalición el registro en la Cámara de la ley del Referéndum.
Sobre las reticencias mostradas ayer por JxSí para tramitar la ley del Referéndum, la oposición cree que es debida más aun cálculo estratégico que a disensiones en el bloque independentista. Estarían buscando, apuntan, la suspensión del TC se produzca tras el pleno previsto para el 6 y 7 de septiembre –a Forcadell le bastaría añadirla a propuesta del Govern con una mera modificación del orden del día–, a las puertas de la manifestación de la Diada y que sirva por tanto como elemento de combustión.
Como un aviso de lo que está por llegar, los miembros de la Mesa, minutos después de reunirse,recibieron la notificación por escrito del Tribunal de Justícia de Catalunya respecto a la resolución del TC que suspende cautelarmente la reforma del reglamento.