Trump renueva sus ataques a Amazon por destruir empleo
Donald Trump, presidente de Estados Unidos, reanudó ayer sus ataques contra Amazon, el gigante del comercio electrónico, por destruir empleo y no pagar impuestos. “Amazon está haciendo un daño enorme a los minoristas que pagan impuestos. Está dañando a pueblos, ciudades y estados de todo Estados Unidos, ¡y se están perdiendo muchos empleos!” escribió Trump en su cuenta oficial de Twitter.
Las críticas a Amazon tienen un trasfondo político. El fundador y propietario de Amazon, Jeff Bezos, es también el propietario de The Washington
Post, periódico que mantiene una postura de rechazo con la política del presidente estadounidense. Y Trump no ha escatimado críticas contra este periódico y su propietario por considerar que difunde “noticias falsas”.
Sin embargo, al margen de la contienda política, lo cierto es que Trump se aprovecha de una crítica de fondo al gigante de la distribución electrónica por la profunda –y en algunos casos terminal– crisis por la que atraviesa el comercio físico en Estados Unidos. Y también es cierto que las autoridades de los diferentes estados han pugnado, hasta ahora sin éxito, para poder recaudar impuestos de las transacciones comerciales que se realicen en sus territorios.
Desde el pasado 1 de abril Amazón ha comenzado a recaudar impuestos estatales por los productos que vende directamente con la excepción de cinco estados que no cobran tasas por la venta de bienes: Alaska, Oregón, Montana, Delaware y New Hampshire.
Sin embargo, la política de Amazon no se aplica obligatoriamente a los vendedores independientes que comercian sus productos a través de la plataforma. Ni tampoco les fuerza a informar detalladamente de las ventas que realizan, lo que les concede una gran ventaja sobre los comercios minoristas con sede física.
El comercio online tiene en la opacidad fiscal una gran ventaja con respecto al comercio físico