Un acto vandálico causa alarma en el metro
La presencia de un líquido tóxico potencialmente peligroso lleva a desalojar dos estaciones de la L3
La presencia de un líquido tóxico obliga a cerrar las estaciones de Lesseps y Fontana
Un sabotaje causó ayer gran alarma en el metro de Barcelona. Alguien arrojó un líquido que se consideró en principio potencialmente peligroso y que finalmente resultó ser salfumán en las cabinas de conducción de dos convoyes de la línea 3, que vio afectado el servicio por esta incidencia entre las estaciones de Diagonal y Lesseps en la tarde de ayer, cuando tanto las estaciones de Lesseps como la de Fontana fueron cerradas y desalojadas por orden de los Mossos. Desde las 19.23 horas, la línea verde funcionaba sólo de Zona Universitària a Diagonal y de Vall d’Hebron a Trinitat Nova.
A primera hora de la tarde se encontró una sustancia desconocida en las cabinas de conducción de dos trenes sin pasaje que estaban parados en la estación de Lesseps (que es temporalmente final de línea por los trabajos que se hacen en el tramo Lesseps-Vall d’Hebron hasta el 3 de septiembre). La presencia del líquido desconocido se detectó en un tren a las 16.25 horas y en otro convoy a las 17.07 horas.
Los trenes se retiraron a la misma estación de Lesseps y TMB solicitó la intervención de los Mossos d’Esquadra a fin de hacer comprobaciones sobre la sustancia encontrada.
La alarma la dio un maquinista, que al atravesar los vagones en el final de línea para cambiar de sentido notó que los gases que emanaban del líquido le habían irritado los ojos y las vías respiratorias.
La policía, tras ordenar preventivamente el cierre de la estación de Lesseps, inició también la investigación para dar con el autor del sabotaje. La estación de Fontana también se vio afectada, ya que es cola de maniobras. La situación obligó a prolongar el recorrido del bus lanzadera que cubre el tramo en obras de la L3 para dar servicio también a las estaciones afectadas por la incidencia, que fue comunicada a los usuarios por megafonía, los indicadores luminosos y por los empleados de TMB.
Todo apunta a que se trató de un acto vandálico, pese a que en un principio se pensó en que el líquido pudiera ser alguna sustancia tóxica o explosiva. Los Tedax hicieron comprobaciones y concluyeron que se trataba de salfumán. Dos tarros de esta sustancia fueron hallados en la estación de Fontana.
La investigación, en cualquier caso, anoche continuaba abierta y se trabajaba para restablecer la normalidad lo antes posible, ya que al tratarse de un viernes la circulación de trenes se alarga hasta las dos de la madrugada.
Los Mossos determinan que la sustancia irritante era salfumán y buscan al autor de los hechos