Detenido un diputado de Macron por agredir a otro del Partido Socialista
No fueron los usos y maneras refinadas que con frecuencia se atribuyen a los miembros de la administración francesa. El diputado M’Jid El Guerrab, del partido La República en Marcha, del presidente Emmanuel Macron, fue ayer detenido acusado de haber agredido a otro miembro de la Cámara, pero de la bancada socialista, que resultó mal herido. El diputado Boris Faure tuvo que ser ingresado en el hospital a resultas del choque para ser atendido de un traumatismo craneoencefálico provocado por los golpes que El Guerrab supuestamente le propinó con un casco de motocicleta.
La pelea o el ataque, según se observen fuentes de una u otra parte, se produjo el pasado miércoles cuando, según el detenido, durante una disputa en la que el socialista le profirió diversos insultos racistas y le agredió físicamente, se defendió y actúo como respuesta a la actitud de Faure. El supuesto autor de los insultos acabó en el hospital y el diputado de Macron convertido en el objetivo de una investigación criminal por acto de “violencia agravada” por el que fue finalmente arrestado ayer. El Guerrab ingresó en comisaría sobre las 15 horas de ayer y se preveía que pasara al menos 24 horas en dependencias policiales dentro del marco de la investigación que dirige la Fiscalía de París. Su detención se produjo en el momento en que el miembro de La República en Marcha se presentó en la comisaría de policía, después de haber renunciado a la inmunidad parlamentaria
El diputado de Macron publicó en su cuenta de la red social Facebook que había decidido abandonar temporalmente el partido y el grupo parlamentario para que la investigación pueda desarrollarse con la mayor tranquilidad posible y se aclare lo sucedido.
El Guerrab es antiguo miembro del Partido Socialista y tiene 34 años. Faure es primer secretario de la Federación Socialista de Franceses en el Extranjero. La prensa gala apunta que, al parecer, el político socialista calificó a su antiguo colega y convertido en rival político de “sucio árabe”.
La falta de sintonía entre ambos ya quedó patente durante el pasado mes de mayo, cuando en un texto publicado en el medio digital Mediapart, el dirigente socialista acusaba a El Guerrab de haberse unido al movimiento que lidera el presidente Macron por puro “oportunismo”, tras haber visto, a entender del socialista, que no tenía posibilidades de ganar las primarias locales.
Sus respectivos partidos condenaron el jueves ya lo sucedido y apuntaron en sendos comunicados que, fueran cuales fueran los motivos que desencadenaran el altercado entre ambos, no justificaban el recurso a la violencia.