La Moncloa elude criticar a los Mossos pero pide explicaciones a Puigdemont
El Gobierno demanda prudencia en el debate de la política antiterrorista
El Gobierno no tiene nada que decir sobre la comunicación de la inteligencia norteamericana respecto a la posibilidad de un atentado en la Rambla. Nada. No quiere debatir sobre la actuación de los Mossos, porque insiste en lo que Mariano Rajoy se ha hartado de decir “el único responsable de los atentados son los terroristas”. De lo demás, nada. “El Gobierno no va a hacer declaraciones sobre cuestiones operativas”, respondió ayer el ministro Portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, cada vez que se le preguntó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros sobre la polémica por la comunicación de los servicios de inteligencia americanos. Ello no impidió que el portavoz del Ejecutivo reclamase al president de la Generalitat explicaciones sobre por qué razón negó inicialmente haber recibido una alerta, fuera o no creíble.
A juicio del Gobierno, está bastante claro el reparto de responsabilidades en materia antiterrorista. “Al juez le corresponde la investigación; las cuestiones operativas son cosa de los expertos, y las políticas se debaten en el marco del pacto contra el terrorismo yihadista”.
Esa misma tesis se la había trasladado esa misma mañana la portavoz del PSOE en el Congreso, Margarita Robles, al ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, en una llamada telefónica, para dejarle claro que el PSOE no iba a debatir sobre seguridad en público. Entre otras cosas porque con la experiencia de la lucha antiterrorista contra ETA se ha demostrado que esos debates han de hacerse en privado.
La llamada de Margarita Robles es un dato importante para el Gobierno porque confía en poder reconducir la polémica política suscitada por los atentados del pasado día 17 de agosto al marco de ese pacto. El Ejecutivo está convencido de que en la lucha contra el terrorismo la unidad política es esencial. Méndez de Vigo aprovechó para insistir en lo que desde el mismo día del atentado viene planteando, que los que no han firmado ese acuerdo, lo suscriban, porque “no debe haber la posición de observador”. Entre los partidos que no lo han suscrito está el PDECat y ERC.
En la unidad insistió el ministro Méndez de Vigo. Y en el reconocimiento del Ejecutivo a las fuerzas de seguridad, “a todas”, recalcó, “porque todas trabajan eficazmente en la prevención” para evitar atentados, y si no, ahí están, dijo, los 13 años sin atentados yihadistas que ha vivido España, desde el 11-M en Madrid, con cientos de detenciones, “80 en Catalunya”, subrayó.
Todos esos hechos le llevan a la conclusión de que “ningún dato aislado, y ningún error que pueda haber, porque todos somos humanos, puede empañar la actuación satisfactoria de todas las fuerzas de seguridad” e insistió en que “no debe haber debates públicos sobre la operativa”.
Eso no quita para que el Gobierno aprovechara para mandarle dos mensajes al Govern, y más en concreto, a Carles Puigdemont. Uno, que se respete la libertad de expresión y de información: “Los medios de comunicación cumplen un papel”. Y que el president de la Generalitat debe explicar por qué desde su Gobierno se dijo primero que no y luego que sí, cuando se le preguntó sobre las alertas recibidas.
El Gobierno, a través de Méndez de Vigo, hizo un nuevo llamamiento a la reflexión destinado a Carles Puigdemont. “Todo esto que estamos viendo, con una confusión general, declaraciones, la ley de transitoriedad, son cosas llamativas, por lo que deberíamos hacer un alto en el camino y pensar si merece la pena que se aparte a Catalunya de todos los países libres”. Y un ejemplo, a juicio del ministro, de lo que pasaría, es lo que le ocurrió al president de la Generalitat en su viaje esta misma semana a Dinamarca, “que no le recibió nadie”.
Sobre el proceso Méndez de Vigo reiteró lo que el Gobierno repite hasta la saciedad, que la Administración central “tiene previsto todos los escenarios posibles y tiene todos los instrumentos para hacerle frente”.
La recurrente pregunta sobre si está dispuesto, para parar el referéndum, incluso a recurrir al artículo 155 de la Constitución, y la respuesta respondió de nuevo al guion del que no se sale nunca el Ejecutivo: “El Gobierno contempla todas las posibilidades, todas están estudiadas”.
Aclaró, además, que la aplicación de una u otra medida dependerá en todo caso de la gravedad de los hechos que lleven a cabo los independentistas. Es decir, el Gobierno, aseguró el ministro Méndez de Vigo, “actuará con proporcionalidad y mesura”. Actuará, además, como hasta ahora ha demostrado que actúa, recurriendo a los tribunales, y que le ha dado frutos, como ocurrió con la sentencia del 14 de febrero, cuando se decretó la ilegalidad de todos los actos preparatorios del proceso de independencia.
Méndez de Vigo pide que todos los partidos se integren en el pacto antiyhadista que es “el marco para el debate” Robles llamó ayer a Zoido para decirle que el PSOE no polemizará en público sobre la seguridad