La Vanguardia

Los caminos de ronda renacen como atractivo turístico

Visitantes de Alaska, Canadá, Australia, Alemania o Francia recorren a pie el litoral catalán

- SILVIA OLLER SARA SANS Palamós/ Tarragona

Pier Paolo y Maria Nicole, una pareja napolitana de 31 años, abandonan poco después de las diez de la mañana el hotel de Palamós donde han pasado la noche para recorrer 13 kilómetros a pie de un tramo de camino de ronda que les llevará hasta Llafranc. Pasarán por calas vírgenes, rincones alejados de la masificaci­ón turística o lugares en los que no oirán más que el oleaje marino. La excursión forma parte de una ruta de tres días que les llevará a descubrir la Costa Brava desde una perspectiv­a poco habitual: la que ofrecen los caminos de ronda, auténticos balcones sobre el mar. Estos senderos litorales, conocidos antiguamen­te por ser caminos de salvamento de náufragos y por los que patrullaba­n los carabinero­s para impedir el contraband­o y el estraperlo, hace tiempo que se están convirtien­do en un filón turístico más de la Costa Brava y también de la Costa Daurada.

Poder adquisitiv­o medio alto, gran interés por la cultura y la gasde tronomía y mucho respeto por la naturaleza son patrones comunes de un perfil de visitante que poco a poco se va internacio­nalizando. En la empresa Camí de Ronda, con sede en La Bisbal d’Empordà, y que organiza travesías a pie por estos tramos de la Costa Brava, el 35% de su clientela es foránea, una cifra que gana enteros año tras año. “Hemos recibido turistas de rincones tan lejanos como Alaska, Canadá, Australia o Nueva Zelanda”, subraya Daniel Punseti, quien agrega que el “mercado prioritari­o” es el alemán y el norteameri­cano. “En Alemania se estima que hay más de 16 millones de personas que practican senderismo, de los que aproximada­mente 6,5 lo hacen fuera de su país”, constata.

Las cifras de negocio que genera este colectivo también van al alza. “Hemos superado en un 25% las reservas recibidas durante todo el año pasado”, agrega Punseti. Sólo el grupo Costa Brava Verd Hotels que desde hace más de veinte recibe a clientes senderista­s –básicament­e escandinav­os y británicos– explica que este patrón de cliente les supone una facturació­n anual de más de 600.000 euros, cifra que representa el 16% de ganancias del grupo. Su gerente, Martí Sabrià, agrega que el turista senderista no sólo beneficia a los hoteles, sino también taxistas, empresas de transporte de equipaje, guías, restaurant­es…

Los meses estivales de julio y agosto el cliente prioritari­o es el nacional. Isabel y Jordi, una pareja Sant Cugat del Vallès, destina una parte de sus vacaciones a hacer una travesía por el tramo que une Sant Feliu de Guíxols i Begur. Cuarenta y tres kilómetros repartidos en tres etapas en las que el matrimonio se deleita con las fabulosas vistas, pero también de la rica gastronomí­a de la zona: desde los langostino­s de Sant Antoni de Calonge y la gamba de Palamós, pasando por el pescado azul de Sant Feliu de Guíxols o el arroz negro de Pala-

Con poder adquisitiv­o medio alto, tienen interés por la cultura y la gastronomí­a La mayoría de los clientes de empresas que organizan rutas son europeos

 ?? RAFAEL LÓPEZ-MONNÉ ?? L’Ametlla de Mar. La localidad del Baix Ebre está salpicada de calas camino del delta del Ebro
RAFAEL LÓPEZ-MONNÉ L’Ametlla de Mar. La localidad del Baix Ebre está salpicada de calas camino del delta del Ebro

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain