El Síndic critica el carril bici próximo a la ONCE
El Ayuntamiento de Barcelona ha hecho caso omiso de un informe de hace cuatro años del Síndic de Greuges de Catalunya, Rafael Ribó. El defensor de los ciudadanos criticó entonces los peligros que representan los carriles bici sobre las aceras y en particular los de la Gran Via próximos a la sede de la ONCE, “donde hay una importante afluencia de personas con discapacidad visual o ceguera”. La queja planteaba que para estas personas resultaba “extremadamente peligroso” compartir aceras con una zona para ciclistas acotada con una simple raya de pintura blanca. Por ello, la Sindicatura de Greuges exigió en el 2013 “sistemas de señalización accesibles” para invidentes. Paradójicamente, a pesar de que el Ayuntamiento aceptó las sugerencias de la institución, cuatro años después no se ha hecho absolutamente nada. No es la primera vez que la concejalía de Movilidad, que depende de Mercedes Vidal, desoye una petición de este tipo. La Síndica de Barcelona, Maria Assumpció Vilà, que es a Barcelona y al Ayuntamiento lo que Ribó es a Catalunya y la Generalitat, criticó a primeros de este año el peligro de los carriles bici en las aceras y el pésimo estado de algunas de estas vías, como el de la Diagonal, entre el paseo de Gràcia y el paseo de Sant Joan. Meses después, este carril bici sigue igual, con el pavimento y la pintura en muy mal estado.