Josep Monserrat
Carta al CIC para que esta materia vuelva a ser obligatoria
DECANO FACULTAD FILOSOFÍA UB
Las facultades de Filosofía de las universidades catalanas han remitido una carta al Consell Interuniversitari de Catalunya en la que reclaman que se mantenga la asignatura de filosofía en las pruebas de selectividad.
La decisión del Consell Interuniversitari de Catalunya (CIC) de eliminar la materia de filosofía de la fase común de las pruebas de acceso a la universidad (PAU) el próximo curso 2017-2018, y desplazarla a la fase específica, ha despertado la indignación de todos los profesionales de las humanidades, desde profesores de instituto hasta decanos y filósofos, tal y como avanzó este diario en su edición de ayer. La última queja llegó ayer mismo, de la mano de las facultades de Filosofía de Catalunya. También desde estas instancias se pide al CIC que dé marcha atrás.
Los departamentos de esta disciplina de la Universitat de Barcelona, Universitat Autònoma de Barcelona, Universitat de Girona y Universitat Ramon Llull hicieron pública la carta que han remitido al Consell Interuniversitari de Catalunya en la que expresan su preocupación por que la asignatura de Filosofía salga de la fase general en las pruebas de selectividad. “Las materias de filosofía del bachillerato y, en particular, historia de la filosofía, además de ofrecer la oportunidad a los estudiantes de conocer una introducción al desarrollo del pensamiento occidental y de conocer algunas de las ideas y temáticas filosóficas básicas sobre la naturaleza del ser humano, su comportamiento y su relación con el mundo, ayuda a los estudiantes a desarrollar toda una serie de competencias: saber comprender textos complejos, saber analizar su estructura y sintetizar lo más relevante, sabe expresarse de forma clara y bien estructurada, tener espíritu crítico y saber argumentar correctamente a favor o en contra de una determinada postura. Estas son competencias relevantes para poder seguir adecuadamente todo tipo de estudios universitarios, desde Economía a Biología, desde una ingeniería a Derecho o Periodismo”. En la misiva se sostiene que no hay ninguna razón académica que justifique el cambio anunciado por el CIC. Argumentan, en este sentido, que hacer desaparecer historia de la filosofía de la fase general es un contrasentido si lo que se quiere es potenciar la evaluación por competencias: “Querer avanzar en esa línea nos debería llevar, justamente, a mantener el examen de historia de la filosofía”.
Los profesores universitarios de Filosofía entienden que, en concreto, historia de la filosofía es un instrumento muy valioso para medir el grado de consecución por parte de los alumnos de una serie de competencias que es importante que adquieran todos aquellos que quieren acceder a la educación superior. El examen de esta asignatura está diseñado para que el estudiante demuestre comprensión de ideas y capacidades en síntesis, en hacer comparaciones entre distintos conocimientos, así como en aprender a razonar de forma personal y creativa sobre una cuestión de interés político, ético, social o epistemológico.
Los profesores ven un contrasentido quitar la asignatura de la fase común si se enseña por competencias