Autopistas disputadas
La concesionaria valora el proyecto industrial del grupo italiano
La presentación de una contraopa por parte de ACS, a través de su filial alemana Hochtief, quita presión al consejo de administración de Abertis, que considera que la oferta del grupo italiano Atlantia tiene margen de mejora teniendo en cuenta el mercado.
La presentación de una contraopa por parte de ACS, a través de su filial alemana Hochtief, hizo respirar tranquilo al consejo de administración de Abertis, celebrado el pasado miércoles en Madrid. Este, por normativa, tenía que hacer público un informe para evaluar la primera oferta del grupo italiano Atlantia, que valoró la concesionaria en 16.340 millones al ofrecer 16,5 euros por acción.
La compañía, presidida por Salvador Alemany y dirigida por Francisco Reynés, resaltó que “existe margen para su mejora [en alusión al precio] teniendo en cuenta la tensión competitiva del mercado”. Destacó que una muestra es el precio de las acciones el pasado 18 de octubre, que ascendía a 18,84 euros, lo que supone una prima del 14% sobre el precio efectivo de la oferta. Y recordó que otra evidencia de que hay margen para subir el precio es la oferta de ACS a 18,76 euros por acción.
El grupo de Florentino Pérez ofrece 2.240 millones más que el grupo de la familia Benetton, hasta 18.580 millones, aunque excluye las acciones de autocartera.
Pese a que el nuevo dueño de Abertis será el mejor postor en lo económico, el consejo de administración evaluó “positivamente el proyecto industrial” propuesto por el grupo trasalpino.
En realidad, la llave de esta venta la tiene el principal accionista, Criteria Caixa, que con un 22,25% del capital tendrá que decidir a quién vende.
Por ahora, en el informe de Abertis, Criteria Caixa hace una mención especial y manifiesta que si hoy en día tuviera que vender Atlantia acudiría a su oferta “en la modalidad de canje”, al igual que manifiestan todos los consejeros a título particular. Esta postura es para mantener la coherencia con el visto bueno al proyecto industrial, pero con la salvedad de que ha surgido otra nueva oferta competidora que habrá que analizar y sobre la que volver a posicionarse.
Otro actor que juega en esta batalla es el Gobierno español, que sigue considerando que la venta de la concesionaria tiene que recibir su visto nuevo. Aquí surgen algunas contradicciones. Abertis con el grupo italiano seguiría cotizando en la bolsa española y su sede se quedaría en España. Por el contrario, con Hochtief pasaría a cotizar en la Bolsa de Frankfurt y su sede se instalaría en la ciudad alemana de Essen.
Ahora, la CNMV tiene que aprobar el folleto de ACS y posteriormente los dos oferentes podrían elevar sus respectivos precios,
Los sindicatos de Abertis consideran que no tiene que disminuir la plantilla con la opa italiana
según recoge el real decreto de la ley de Opas competidoras. No obstante, el primer oferente, en este caso Atlantia, siempre tiene la opción de mejorar económicamente su propuesta después de la apertura de los sobres.
El resto de los accionistas también tendrán que posicionarse. Hasta ahora, el fondo TCI, con un 2,7% y el grupo Villar Mir, que mantiene un 1,7%, habían apoyado la propuesta de Atlantia. Ayer, el fondo Elliot Capital afloró un 1,4% en plena guerra de opas. Entre los inversores cualificados también figuran Barclays Bank o Credit Suisse.
Por su parte, la representación legal de los trabajadores de Abertis hizo llegar su postura al consejo de administración. Ve con malos ojos que Atlantia quiera reducir su plantilla y lo manifiesta así: “Carece de toda justificación que se planteen posibles ajustes que se traduzcan en la disminución de empleados”. Y justifican que “si los negocios crecerán tras la operación, no hay necesidad de una reestructuración de plantilla por duplicidad”.