El Garraf evaluará el impacto de los peajes en su competitividad
El Consell Comarcal del Garraf, atendiendo a una vieja reivindicación de las empresas y los ayuntamientos, ha encargado un estudio sobre el impacto que la presencia de los peajes en la autopista C-32 tiene en la competitividad de la comarca.
La movilidad en el Garraf, como ya se recordó desde el Consell Comarcal en el 2013, ha sido históricamente “uno de los déficits más importantes para la mejora de las condiciones de vida y el desarrollo social y económico de nuestro territorio”. Ir y volver de Barcelona desde Vilanova i la Geltrú en turismo por la C-32 costaba entonces 12,84 euros. Hoy cuesta 13,36 euros. Se añadía que en “los últimos años, con el rápido crecimiento demográfico, no sólo no hemos notado ninguna mejora, sino que, además, constatamos el deterioro de la red de Rodalies y el encarecimiento injustificado de los peajes sin tener ninguna alternativa de acceso al área metropolitana de forma rápida y segura para los millares de desplazamientos y conexiones que se producen a ambos lados”. La sinuosa carretera de las costas del Garraf no se considera una buena alternativa. La autopista C-32 y sus caros peajes han supuesto desde su inicio un “agravio” comparativo. Eso, según el Consell Comarcal, “ha limitado nuestra competitividad y castigado doblemente en ciudadanos y empresas de la comarca, con el agravante de que en nuestra comarca, además, hay dos peajes (Vallcarca y Cubelles), que distorsionan la movilidad de paso y que no están al servicio del territorio”. El estudio está subvencionado por la Diputación de Barcelona.
El concejal adjunto a Presidència del Consell Comarcal, Lluís Giralt, explica que “la sociedad civil, las entidades que se han formado para trabajar el tema de los peajes, los colectivos sindicales y el mundo empresarial han mostrado interés en el estudio porque este es un problema que los afecta directamente”. Los objetivos son determinar los impactos negativos y/o positivos que suponen los peajes en el desarrollo y el empleo de empresas del territorio y en la competitividad y atracción de posibles actividades interesadas en el territorio. También se quiere determinar el valor óptimo del coste del peaje que sería soportable para las actividades económicas y comparar la pérdida de competitividad en relación con otros territorios con infraestructuras similares. El estudio ampliará su investigación hasta el Baix Penedès.