Superávit pese a todo
Sólo seis comunidades registran déficit en sus cuentas
Las cuentas de Catalunya se mantuvieron en positivo con un excedente de 160 millones de euros hasta agosto, unos números que puede que varíen en los meses subsiguientes.
La inyección de la liquidación definitiva del 2015 del fondo de financiación autonómica se ha convertido en un buen colchón para las cuentas territoriales. En los primeros ocho meses del año, las comunidades lograron aumentar los números negros hasta los 1.366 millones de euros –es decir, el equivalente al 0,12% del PIB–, frente a los 852 millones de euros de déficit de un año antes. En el caso de Catalunya, se mantiene de nuevo en positivo, al registrar un superávit hasta agosto de 160 millones, un 0,07% –el mes pasado, fueron 171 millones de euros–.
De esta forma, las autonomías tienen más cerca el cumplimiento de su objetivo para final de año de un 0,6% del PIB. Este julio, el Estado les entregó la mayor parte de los 8.653 millones adicionales (2.000 millones para Catalunya) a lo inicialmente estimado sobre la recaudación de impuestos durante el 2015. El cierre del presupuesto a 31 de agosto no refleja, en todo caso, la intervención de los pagos de la Generalitat, que ejecutó el Ministerio de Hacienda a mediados de septiembre.
Sólo seis de las 17 comunidades autónomas presentaron en agosto déficit. Destaca Murcia, con un desequilibrio entre los ingresos y los gastos del 0,63% del PIB, superando por tanto el objetivo para todo el año. Es más, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) advirtió la semana pasada que también es muy improbable que Murcia logre ceñirse a la meta del 0,4% fijada para el 2018. Asimismo, según la Airef, lo tienen complicado la Comunidad Valenciana y Extremadura. El organismo que preside José Luis Escrivá no ha ofrecido todavía información sobre las perspectivas de cumplimiento de la senda fiscal de Catalunya el próximo año, porque están analizando el alcance del impacto de la crisis política en sus cuentas.
Sin la ayuda financiera, el déficit conjunto de las administraciones públicas –excluyendo las corporaciones locales– alcanzó en agosto un 2,34% del PIB. Está a casi ocho décimas del objetivo para todo el año, comprometido con la Comisión Europea en el 3,1% del PIB.
En el caso de los fondos de la Seguridad Social –conformado por Fogasa y el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), además del sistema de la Seguridad Social– el desfase entre ingresos y gastos registrado hasta agosto fue del 0,6% del PIB. Según el Ministerio de Hacienda, las cuentas de este subsector se han visto aliviadas por el incremento de las cotizaciones sociales del 5,5 en estos primeros ocho meses del año.
Hacienda también publicó ayer el cierre presupuestario de la administración central en septiembre. Hasta entonces, el desequilibrio del Estado bajó a 17.028 millones de euros, un 1,46% del PIB. Tal y como ha avisado en reiteradas ocasiones la Airef, es prácticamente imposible que el Estado cumpla con su meta para el 2017 del 1,1%.
El departamento de Montoro atribuye esta moderación en el desfase fiscal de la administración
El impuesto de sociedades (+23,4%) y el IVA (+5,5%) ayudan a bajar el desfase del Estado al 1,46% del PIB
central a un incremento de los ingresos del 5,5% (6.355 millones más que en el mismo periodo del 2016), frente a una caída de los gastos del 3,9%. Sobresale la subida de los ingresos tributarios –entre enero y septiembre, crecieron al 6,7%– y, en particular, el repunte del impuesto de sociedades (23,4%), gracias a la mejora los primer pago fraccionado de este año a raíz de los últimos cambios normativos. Al tiempo, con el buen ritmo de la actividad económica, los ingresos por el IVA aumentaron un 5,5%. El informe de la Intervención General del Estado reseña también que hasta septiembre la subida de la recaudación tributaria “ha compensado en parte la caída de las cotizaciones sociales en un 2,7%”.