La Vanguardia

Puigdemont se ofrece para ser candidato desde Bruselas

oeEl president cesado no ve garantías en el 21-D con el Govern en prisión oeEl PDECat presiona a Esquerra para formar una lista conjunta oeERC quiere incorporar a “descontent­os” con la antigua Convergènc­ia

- DANI ROVIROSA Bruselas

Vila sale de la cárcel. El exconselle­r Santi Vila abandonó ayer la prisión madrileña de Estremera después de pagar la fianza de 50.000 euros. Ocho de sus compañeros de gobierno seguirán privados de libertad.

GARANTÍAS

“Queremos que esas elecciones se puedan desarrolla­r en las condicione­s más normales posibles. Con un Gobierno en la cárcel no van a ser independie­ntes”

EN BRUSELAS

“No he pedido asilo en Bélgica. Estoy aquí para defender un gobierno legítimo contra una situación de ausencia de garantía judicial sobre un asunto político”

Casi a la misma hora que la Audiencia Nacional dictaba ayer la orden de detención contra Carles Puigdemont, el presidente cesado de la Generalita­t aseguraba en una entrevista en la televisión pública belga, emitida en horario de máxima audiencia, que está “dispuesto a ser candidato” a las próximas elecciones del 21 de diciembre. Incluso a hacer la campaña electoral desde Bélgica, porque “en un mundo globalizad­o se puede hacer”.

Su decisión, explicó el expresiden­t en esta entrevista, es evitar escenarios de enfrentami­ento civil en Catalunya, y su apuesta por abrir la puerta a encabezar una lista electoral, aunque sea desde Bruselas, se basa en la necesidad de dar una respuesta política a los encarcelam­ientos de los consellers de su Govern y los líderes de las entidades independen­tistas.

“Nos consideram­os un Gobierno legítimo”, dijo Puigdemont, y por eso cree que “debe haber una continuida­d”, que ve más factible instalándo­se en la capital comunitari­a, desde donde cree que puede “expresar al mundo lo que pasa en España”. Porque si está en Bruselas, dijo, no es para pedir asilo, sino para “hacer frente a una situación de falta de garantías jurídicas y para tener la libertad de expresarme con seguridad”.

El presidente cesado desea que los comicios del 21 de diciembre “se puedan desarrolla­r en las condicione­s más normales posibles”, aunque no confía en ello. “Estando un gobierno en la prisión, esas elecciones no van a ser neutras, independie­ntes, normales”, sentenció, ya que “se ha anulado un gobierno y un Parlamento totalmente democrátic­o (…) haber cumplido con el mandato electoral que los ciudadanos votaron”. En este sentido, Puigdemont reiteró lo dicho en la rueda de prensa que celebró en Bruselas: espera que el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, acepte los resultados si ganan los partidos independen­tistas.

Un Rajoy al que Puigdemont volvió a ofrecerle la posibilida­d de pactar una solución dialogada al conflicto político. Y pregunta- do sobre la posibilida­d de que ese contacto se produjese en Bruselas, respondió que “sí”, porque no tiene “miedo” a reunirse con el presidente del Gobierno “donde él desee”.

El de ayer es su primer gran anuncio desde que se instaló en Bruselas –donde permanece con cuatro de sus antiguos consellers, Toni Comín, Meritxell Serret, Lluís Puig y Clara Ponsatí– y supone un cambio de postura respor pecto al discurso que ha mantenido hasta ahora en cuanto a su continuida­d en la vida política.

Desde el momento en que aceptó convertirs­e en president, Puigdemont dejó claro que no sería candidato a la reelección. En su partido se habían intentado todo tipo de estrategia­s para convencerl­o pero nunca con éxito. Ni siquiera las conversaci­ones con el expresiden­t Artur Mas tuvieron efecto. “La respuesta es no”, contestó siempre.

De hecho, con el proceso soberanist­a en el tramo final, Puigdemont seguía rechazando encabezar una candidatur­a si se optaba por convocar elecciones, fueran antes o después de la DUI.

Tras la convocator­ia electoral del 27 de octubre por parte del Gobierno central, con la aplicación del artículo 155, Puigdemont sí era partidario estos días de impulsar una lista unitaria del independen­tismo aunque no aclaró nada sobre su futuro político.

De todos modos, ahora lo que más apremia para él es preparar bien su defensa con su abogado en Bélgica, Paul Bekaert, para intentar evitar la extradició­n a España para declarar por los delitos de rebelión, sedición y malversaci­ón de fondos públicos que le imputa la Audiencia Nacional. “No he huido de la justicia”, dijo sobre este punto. Defendió que lo que está haciendo es declarar “ante la verdadera justicia”, en referencia al juez de instrucció­n que debe decidir sobre su posible entrega.

La Fiscalía belga recibió ayer, a última hora de la tarde, la orden de detención, ya traducida. Una vez comprobado que los delitos que se le imputan a Puigdemont y los cuatro exconselle­rs tienen su equivalenc­ia en el ordenamien­to jurídico belga, entregará la orden al juez de instrucció­n, que en 24 horas deberá decidir si lo detiene o lo deja en libertad, antes de dictar sentencia sobre la petición cursada desde España. Desde Bruselas, ni su abogado ni su entorno aclaró si Puigdemont estará dispuesto a entregarse a la justicia si se le comunica la orden de detención.

 ??  ?? AP PHOTO / AP
AP PHOTO / AP
 ?? TV RTBV ?? Carles Puigdemont, entrevista­do en el informativ­o de la tarde de la televisión pública belga
TV RTBV Carles Puigdemont, entrevista­do en el informativ­o de la tarde de la televisión pública belga
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain