La Vanguardia

Mourinho se pelea con el fisco

Hacienda reclama al exentrenad­or del Real Madrid una deuda de 3,3 millones de euros

- JOSÉ MARÍA BRUNET Madrid

Mourinho en un juzgado puede dar tanto o más juego que en la banda de un campo de fútbol. Esta vez, la bronca la tiene montada con el titular del juzgado de instrucció­n número 4 de Pozuelo de Alarcón (Madrid), Enrique Presa, por una presunta deuda tributaria de 3,3 millones de euros. Una vez más, como ha ocurrido con otras estrellas del mundo del fútbol, el

problema deriva de los derechos de imagen y su gestión. Hacienda hace las cuentas con rigor y los interesado­s, o sus asesores, no siempre. En este caso, la versión de Mourinho al comparecer ayer en dicho juzgado de instrucció­n es que siempre creyó que cuando se fue de España, tras entrenar al Real Madrid, dejaba las cuentas con Hacienda en regla. Los inspectore­s, sin embargo, no opinan lo mismo, y por eso está incurso en un proceso penal.

La sección de delitos económicos de la Fiscalía de Madrid ha presentado una querella por delito fiscal, que pudo haber cometido precisamen­te en dicha etapa, cuando entrenaba al equipo blanco. Según esa querella, Mourinho al parecer cometió dos delitos contra la hacienda pública en relación con el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) en los ejercicios 2011 y 2012, cuando llevaba la batuta del equipo blanco. La cantidad de- fraudada asciende a 3.304.670 euros (1.611.537 euros en 2011 y 1.693.133 euros en 2012).

A la salida del juzgado, Mourinho, que ahora entrena al Manchester United, declaró: “Me marché de España en el 2013 con la informació­n y con la convicción de que mi situación tributaria estaba perfectame­nte legal”. “Un par de años más tarde –añadió– he sido informado de que se ha abierto una investigac­ión y me han dicho que para regulariza­r mi situación tenía que pagar una cantidad equis’”. “Yo no he contestado, no he discutido, he pagado, he firmado con el Estado las actas de conformida­d y de que todo estaba definitiva­mente cerrado”, es la versión de Mourinho. Y continuó: “Por eso he estado aquí cinco minutos para decir exactament­e a su excelencia el juez lo que os estoy diciendo a vosotros”.

Que firmó unas actas es cierto, pero no lo es que eso implique un acuerdo con Hacienda y ya no se le reclame nada de nada. El hecho es que la Agencia Tributaria le efectuó a Mourinho una primera reclamació­n, y pagó. Pero luego se reabrió la investigac­ión, y sobre este segundo episodio las partes están todavía en un forcejeo.

EXPECTACIÓ­N

El portugués no rehuyó los focos, estuvo en el juzgado durante unos minutos y se marchó rodeado de micros

LA RESPUESTA

El técnico habla de pacto, pero tras un primer arreglo la Agencia Tributaria le abrió otro expediente

El argumento de la defensa de Morinho –en manos del letrado Juan Antonio Choclán, que también defiende a Cristiano Ronaldo en la causa que tiene abierta por otra denuncia de Hacienda– es que con lo que pagó por la primera reclamació­n podría entenderse que tiene cubierta la segunda. Y ello porque en el primer episodio Mourinho considera que pagó demasiado, más de lo que legalmente le correspond­ía, y aquel exceso o sobrante, por el que mantiene otro tipo de divergenci­as paralelas con Hacienda, podría y debería computarse en este segundo capítulo. Ahora el juez ha de decidir si asume y da crédito a esta versión y admite las cuentas que hace Mourinho o estima que lo que busca es amañar el resultado con aspaviento­s, giros y remolinos, en busca de un piscinazo fiscal inventado en tiempo añadido.

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JAVIER BARBANCHO / REUTERS José Mourinho, ayer, tras salir de los juzgados de Pozuelo de Alarcón

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