Una acepción romántica
La palabra ilusión viene del latín illusio, engaño, y así ha transmitido su significado en muchos idiomas, entre ellos en castellano y catalán. Pero en estas dos lenguas adaptan también un sentido positivo que se incorpora en el siglo XIX a través de la poesía de Espronceda asociado a la esperanza y al sentido de la vida.